Cientos de empleados de Futura piden al Govern que medie y garantice alternativas

Palma.-  Un grupo de unos 300 trabajadores de Futura se concentró hoy ante la sede de la aerolínea en Palma para reclamar a la dirección que les informe sobre el futuro de la empresa y pedir al Govern que medie para garantizarles una alternativa si ésta cierra.

La concentración coincidió con un comunicado emitido por la empresa en su página web -dirigido a empleados y colaboradores-, en el que la dirección reconoce su "escaso margen de maniobra" dado que todos los planes de viabilidad presentados "se han visto frustrados por falta de inversores".

Ante esta situación y con un proceso de concurso de acreedores abierto, la Dirección General de Aviación Civil informó hoy a Futura de la suspensión temporal de su licencia de explotación, lo que le prohíbe hacer vuelos comerciales a partir de ahora.

La suspensión se convertiría en definitiva el 1 de enero de 2009, coincidiendo con la fecha de vencimiento de la licencia, pero Futura podría volver a operar si en ese plazo se pudiera reflotar.

Según explicó a Efe el presidente del Comité de Empresa, Julián Barrero, los trabajadores ven en estas decisiones "un punto y seguido más hacia la desaparición de la compañía".

Sus demandas, no obstante, se centran en conseguir que la dirección de Futura les garantice el cobro de los salarios correspondientes a septiembre y los puestos de trabajo de los 1.200 empleados que forman la plantilla en sus bases de Palma de Mallorca, Tenerife y Las Palmas.

Barrero, "indignado" al igual que sus compañeros por el trato recibido por la empresa en los últimos días, no acaba de entender "por qué una compañía con beneficios en 2007 y con 19 años de experiencia como referente en seguridad y puntualidad de vuelos chárter, da al traste en dos meses".

La situación de Futura, a juicio de Barrero, no se explica por la subida del petróleo, ni por la contratación de más pilotos, ni por la pérdida de clientes, ni por una caída en la actividad, sino "por una mala gestión y planificación" de sus directivos.

Los trabajadores, conscientes de la grave situación, piden al Govern balear que "haga una mediación efectiva para que si la empresa no es viable se busquen alternativas a los empleados y se les garantice su indemnización y su subsidio", dijo Barrero.