El rostro de la infamia

Me gusta ponerle cara a las cosas. Puede que sea una necesidad pueril, un vicio adquirido, pero lo cierto es que colgarle un rostro a determinados hechos me ayuda a entender las circunstancias, a apreciar los detalles, a comprender la esencia de los elementos. A humanizar la información. En el rostro de Hitler, para que ustedes me entiendan, puedo ver toda la intrínseca maldad del nazismo.

(EFE)

Quiere privatizar Telemadrid.

Así las cosas, cuando leo que el Partido Popular de Madrid quiere privatizar Telemadrid me quedo, como se lo diría yo… insatisfecho. Y entonces pasa lo que pasa: que busco de manera inconsciente una cara que refleje el verdadero sentido de ese suceso. ¿Quién podría comunicarme en persona la privatización de la televisión de los madrileños? Pues ya se lo imaginarán ustedes: Esperanza Aguirre. Un busto parlante, el de la mujer que ya está privatizando la educación y la sanidad de Madrid. Sí, la misma que se burla de la Educación para la Ciudadanía y se pasa por el forro la ley del tabaco. La lectora de Sara Mago.

Sin ese rostro de referencia me resultaría muy complicado entender los motivos por los que una Comunidad quiere deshacerse de su televisión. Sobre todo teniendo en cuenta que la única y patética razón que ha ofrecido el gobierno madrileño ("la información tiene que estar en manos de la iniciativa privada") es un insulto a la inteligencia y a la libertad de expresión. ¿Existen otros intereses? Miren la cara de Esperanza y les resultará muy sencillo descubrir el porqué de las cosas.

La Comunidad de Madrid quiere privatizar Telemadrid por tres razones:

1. Son incapaces de hacer una televisión digna. Cada año tiene menos audiencia y pierde más dinero.
2. Al privatizarla, la venderían a un amigo, socio o familiar, que olvidaría definitivamente la función pública de la cadena y la convertiría en un negocio rentable.
3. Con la tele en manos privadas (amigas) ahorrarían dinero sin, y esto es importante, perder el control político de la cadena. Recuerden que el poder del medio de comunicación como arma propagandística es el único motivo real por el que el Gobierno de la Comunidad de Madrid necesita una televisión.

¿Ven qué fácil es entender las cosas cuando se mira a Esperanza Aguirre a la cara?

Siga leyendo, por favor…

Un motivo para no ver la televisión

Hacia el malestar social

Autores: Observatorio de Servicios Públicos de ATTAC Madrid y Plataforma en defensa de los Servicios Públicos de la Comunidad de Madrid

Editorial: Attac-España

"Los servicios públicos constituyen un elemento imprescindible para la cohesión social, la reducción de la pobreza, y la mejora de la calidad de vida, siendo además, en muchos casos un derecho social en sí mismos. Esto debería llevar a su exclusión del ámbito del mercado, y ser objeto de un tratamiento especial, acorde con su naturaleza, por parte de los poderes públicos.

Con estas palabras comienza el librito (65 páginas, tres euros, copyleft) editado por ATTAC, una asociación que surgió a partir de una propuesta del Director del periódico Le Monde Diplomatique. «ATTAC es un movimiento internacional de ciudadanos preocupados por los asuntos colectivos y empeñados en buscarles solución», aseguran en su web.

Una lectura tan breve como instructiva para todos aquellos que creen en lo público. Sobre todo si están dispuestos a luchar por sus derechos…