Un vecino de la provincia de Salamanca recorre 130 encierros al año de España y Portugal

San Felices de los Gallegos (Salamanca).-  Ángel Rico Redero, un vecino del municipio salmantino de San Felices de los Gallegos, participa en alrededor de 130 encierros anuales, que se celebran en España y Portugal, según ha asegurado hoy en una entrevista con EFE.

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Esta mañana se ha levantado a las 4,00 horas para ordeñar a las 200 ovejas de leche que tiene en su pueblo y, sobre las 8,00 se ha marchado en un coche con un amigo de San Felices para correr en el encierro que se ha celebrado en Medina del Campo (Valladolid), "ya que ayer también estuve y me causaron muy buena impresión", ha manifestado.

Este hombre de 54 años de edad se mantiene en forma ya que "todos los días que no tengo encierros me hago entre 20 y 25 kilómetros corriendo", ha señalado.

Ángel Rico es un entendido del mundo taurino que intenta colaborar en todos los encierros en los que participa "con la única intención de que las cosas salgan bien y de que los toros sean presenciado por las gentes que están en el recorrido".

"Siempre estoy trabajando, aconsejando a la gente, en los corrales, dentro de la plaza cuando algún toro se emplaza", ha afirmado.

Rico insiste: "yo, lo único que pretendo es disfrutar corriendo delante de los toros y, sobre todo, colaborar con la organización".

La temporada de encierros de este salmantino comienza en el vecino país de Portugal, en el municipio de Aldea Velha, una de esas aldeas lusas que hace frontera con la Sierra de Gata salmantina, donde siempre se celebra un encierro a caballo el uno de enero.

"En Portugal, el que más me gusta es el que se celebra en el municipio de Foios (que linda con la localidad salmantina de Navasfrías), aunque también acudo a los encierros de El Soito, Lageosa, Aldeia da Ponte o al de Forcaios", según ha relatado el corredor, conocido allá donde va como "El Mellizo", ya que tiene un hermano gemelo.

Confiesa Ángel Rico que cuando más descansa es en el último trimestre del año ya que, según asegura, "el último encierro que corro es el de Fuentespreadas (Zamora), el primer domingo de octubre".

Aunque es un apasionado de los encierros del municipio salmantino de Fuenteguinaldo, que se celebran en la tercera semana de agosto, asegura que "a día de hoy, los encierros de campo más vistosos son los que celebra Cuéllar (Segovia)", de los que destaca la gran coordinación de los organizadores "ya que es muy difícil celebrar un encierro donde participan 300 caballos".

Rico siempre porta consigo un amuleto, que no es otra cosa que "la camisa roja que llevo puesta siempre para correr", afirma.

El mayor percance que ha sufrido Ángel Rico fue en unos encierros de Villavieja de Yeltes (Salamanca), cuando un cabestro le embistió y le rompió la clavícula.

"Estaba de espaldas y la gente me avisó pero, como me falta algo de audición, no escuché nada y me arrolló el cabestro, dejándome casi tres meses de baja", ha explicado.

Su mujer, Isabel Herrero, ha recordado que "también tuvo un percance en las fiestas de El Noveno de San Felices, cuando un toro lo aplastó contra un carro de madera".

"No me gustan los toros, los odio y cada vez lo paso peor ya que Ángel siempre está metido en medio de los toros", ha confesado su esposa.