Identificadas 50 víctimas de una tragedia aérea aún con muchos interrogantes

Madrid.-  Los expertos forenses han identificado los restos de 50 de las 153 víctimas mortales de la tragedia aérea de Madrid, que aún sigue rodeada de muchos interrogantes y que, según los investigadores, tardará al menos un mes en aclararse del todo.

El funeral por las víctimas del accidente tendrá lugar el próximo 1 de septiembre en la Catedral de la Almudena, según informó el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón.

La prioridad ahora es la identificación, lo antes posible, de todas las víctimas y la atención a sus familiares y allegados pero, al mismo tiempo, se siguen buscando las causas del siniestro del vuelo de Spanair que se estrelló el miércoles al despegar con destino a las Palmas de Gran Canaria (archipiélago atlántico español).

Un vídeo grabado por los servicios de seguridad del aeropuerto madrileño muestra que "el piloto apuró al máximo la pista" y no tomó altura en situación de normalidad.

Así lo reveló a la prensa el presidente del Gobierno regional de Canarias, Paulino Rivero, citando al jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, que fue quien pudo ver la grabación del despegue.

Tras reunirse con Rodríguez Zapatero en el Palacio de la Moncloa, Rivero aclaró que él no lo había visto "pero el presidente sí, y parece que en el segundo intento de despegue, el piloto apura al máximo las posibilidades que da la pista, y se observa que el avión no coge la altura que en situaciones de normalidad estamos acostumbrados a ver".

Al parecer, el aparato no se incendió en el aire como se dijo en un principio, sino que estalló segundos después de rebotar contra la pista.

Los restos del MD-82 siniestrado, que quedaron esparcidos en un radio de 200 metros, ya han sido totalmente retirados de la pista en la que ocurrió el accidente.

También se ha borrado de todas las pantallas del aeropuerto de Barajas el código del fatídico vuelo, el JK5022, que desde hoy ha pasado a ser el JK5024.

Lo que no podrá borrarse en mucho tiempo son las escenas de dolor y conmoción que se han vivido estos días en el aeródromo madrileño, así como en el recinto ferial de la capital de España que sirvió de tanatorio improvisado y lugar de identificación de las víctimas, tal y como ocurrió tras los atentados terroristas ocurridos en Madrid el 11 de marzo de 2004.

Siguiendo las órdenes del juez que investiga el caso, los cadáveres fueron trasladados a un depósito instalado en el cementerio madrileño de La Almudena, donde los forenses están practicando las pruebas dactilares y de ADN necesarias para la identificación.

El magistrado Javier Pérez ha pedido informes a la Guardia Civil, la Policía Judicial y a los técnicos de Aeropuertos Españoles de Navegación Aérea (AENA) y de la comisión de investigación del siniestro creada por el Gobierno.

Fuentes jurídicas dijeron a Efe que en el Juzgado no se ha recibido aún ningún informe técnico y recordaron que la instrucción de las causas relacionadas con accidentes aéreos es "larguísima" debido a su complejidad técnica.

Sus pronósticos coinciden con los del fiscal asignado al caso, Emilio Valerio, quien declaró a la cadena privada de radio SER que espera que el informe con el análisis de las cajas negras esté a disposición del Juzgado en un plazo no superior a un mes.

Hasta el momento, y según datos facilitados por el alcalde de Madrid, Alberto Ruíz-Gallardon, ya han sido identificados 50 de los 153 cadáveres y los expertos de la Guardia Civil, la Policía Científica y el Instituto Nacional de Toxicología han formado tres equipos conjuntos para acelerar los trabajos.

La buena noticia del día es que uno de los cuatro heridos que permanecían hospitalizados en estado muy grave, ha mejorado.