Geli reclama una mejor financiación para lograr invertir 1.600 euros por persona

Prada (Francia).-  La consellera de Salud, Marina Geli, ha avisado hoy de que se requiere de un esfuerzo financiero para que se pueda cumplir el objetivo en los próximos dos años de invertir una media de 1.600 euros al año por habitante en sanidad.

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(EFE)

La consellera de Salud, Marina Geli, ha avisado hoy de que se requiere de un esfuerzo financiero para que se pueda cumplir el objetivo en los próximos dos años de invertir una media de 1.600 euros al año por habitante en sanidad.

La responsable de Salud se ha desplazado hoy hasta Prada (Francia) para participar en una conferencias dedicada a salud sexual y reproductiva organizada en la Universitat Catalana d'Estiu (UCE).

En una rueda de prensa posterior a la conferencia, Geli ha descartado que, al menos en el ámbito de la salud, las políticas sociales estén en situación de peligro, tal como apuntó hace tres días el conseller de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet (ERC), quien alertó de que no se podría continuar dando los servicios sin una solución "mínimamente justa" al sistema de financiación.

La consellera socialista ha asegurado que el sistema sanitario catalán "aguanta", pese a que se necesitan más recursos financieros, y lo ha situado "entre los mejores de Europa".

Sin embargo, Geli desconoce si conseguirá el objetivo de pasar, en los próximos dos años, de la inversión de 1.250 euros por persona actuales a los 1.600 euros, y ha remarcado que para lograr este fin el departamento debe aumentar un 9 por ciento cada año su presupuesto, por encima del 5,5 por ciento que ha crecido el del presente ejercicio, de unos 9.000 millones de euros.

La consellera se ha mostrado "optimista" con el proceso de negociación del nuevo modelo de financiación entre Estado y Generalitat porque el Gobierno, ha dicho, conoce las necesidades y el "sistema federal" con el que se gestionan los diferentes sistemas de salud de las Comunidades Autónomas.

Geli también ha abordado hoy en Prada las políticas del departamento en materia de salud sexual y reproductiva, especialmente en lo que se refiere a la interrupción voluntaria de embarazo.

La voluntad del departamento, ha dicho, es lograr antes de fin de año una posición unitaria sobre los cambios que introducir en la futura ley estatal del aborto, para lo que se deberá decidir si se mantiene el modelo actual o se apuesta por una normativa de plazos, que es la que está vigente en muchos países europeos.

También se deberá acordar en los próximos meses si se amplía o no la cobertura de interrupciones en centros privados autorizados y otros aspectos de ámbito más ético, como si, además de los profesionales, los centros sanitarios públicos también pueden objetar.

La Generalitat ofrece interrupciones gratuitas en los supuestos de violación o malformación del feto dentro de los plazos que establece la ley -antes de 12 y 24 semanas de gestación, respectivamente- y financia el 18 por ciento de las interrupciones en centros privados en el tercer supuesto legal -sin plazo si hay riesgo para la salud física o psíquica de la madre-.

Pero su prioridad es centrar los esfuerzos en la prevención con campañas de concienciación del uso de métodos anticonceptivos, sobre todo entre la población más joven, ha añadido Geli.

Geli ha destacado que en los últimos años la natalidad ha repuntado, gracias en parte a la inmigración, y ha resaltado el "retraso de la maternidad" por la tardanza en la "estabilización laboral" de las mujeres.

Según los últimos datos de Salud, una de cada cuatro mujeres catalanas embarazadas tiene más de 35 años, mientras que hace quince años ese porcentaje era sólo el 12 por ciento.