Fernández, un intelectual apasionado por el béisbol, gobierna por tercera vez Dominicana

Santo Domingo.-  Leonel Fernández, un intelectual que alguna vez soñó con ser jugador de béisbol, asumirá mañana por tercera vez como presidente de República Dominicana, en lo que será su segundo mandato consecutivo.

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(EFE)

Fernández, de 54 años, gobernó este país caribeño por primera vez entre 1996 y el 2000 y volvió al Palacio Nacional, sede del Ejecutivo, para el periodo 2004-2008, mandato que renovó en las urnas el pasado 16 de mayo como candidato del PLD.

Fernández, de 54 años, gobernó este país caribeño por primera vez entre 1996 y el 2000 y volvió al Palacio Nacional, sede del Ejecutivo, para el periodo 2004-2008, mandato que renovó en las urnas el pasado 16 de mayo como candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

Considerado por sus seguidores como un hábil vendedor de sus logros políticos, aunque sus enemigos le acusan de engañar al pueblo, Fernández venció con comodidad el aspirante del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas, en la primera vuelta de las elecciones de mayo pasado.

Intelectual de sólida formación, Fernández se vale de su sencillez en las formas y su hablar claro y pausado para exponer sus ideas, lo que le confiere una imagen de seguridad que constituye uno de sus principales activos políticos.

Casado en segundas nupcias con la abogada Margarita Cedeño, con la que tiene una hija, es padre de otros dos hijos de un matrimonio anterior.

El presidente dominicano encarna como nadie el ejemplo de tantos compatriotas suyos que emigraron a Estados Unidos y allí crecieron en lo personal, lo intelectual y lo profesional.

Tenía sólo nueve años cuando marchó con su familia a Nueva York, donde cursó sus estudios primarios y secundarios, antes de regresar a Santo Domingo para estudiar Derecho en la Universidad Autónoma (UASD).

Con esa base dio sus primeros pasos en política en 1973, cuando se unió a los fundadores del PLD y a una legión de militantes que acompañó al ex presidente Juan Bosch en los comienzos de esa formación política.

Bosch, fallecido en 2001, es uno de los principales referentes políticos de Fernández, quien le considera autor de una teoría política encaminada a lograr una sociedad dominicana "moderna, avanzada y funcional".

En el plano ideológico, el presidente dominicano, como dirigente de un partido que se considera progresista y partidario del cambio social, entiende que la diferenciación clásica entre izquierda y derecha ha sido superada en su país y prefiere hablar de un ideario popular, humanista y de progreso.

Como político, Fernández ha basado su gestión en la mejora de la economía, la reducción de la pobreza y el aumento del bienestar, al tiempo que defiende la necesidad de lograr avances en el terreno social, en educación, seguridad, justicia y lucha contra la corrupción.

Su tercer mandato lo iniciará este sábado con la mirada puesta en la crisis económica por los altos precios de los alimentos y del petróleo, un fenómeno que no es ajeno a la mayoría de los países latinoamericanos.

Fernández se confiesa un hombre de una curiosidad inagotable, al que le interesa "todo", por lo que dedica el tiempo que puede a mantenerse actualizado en los más diversos campos.

Ha sido profesor universitario y tiene doctorados honoris causa de varias universidades, entre ellas las de Harvard (EE.UU.), la Sorbona (Francia) y la Universidad de Santiago de Chile.

Amante de la comunicación, escribió su tesis doctoral sobre "El delito de opinión pública" y también es autor de los libros "Los Estados Unidos en el Caribe: de la Guerra Fría al Plan Reagan" y "Raíces de un poder usurpado".