Massú no se rinde y dice que quiere "estar en Londres"

Pekín.-  Nicolás Massú ha defendido dos días en Pekín su doble oro olímpico de Atenas antes de caer en el cuadro individual y en el de dobles y ahora piensa en Londres 2012, donde disputaría sus cuartos Juegos.

ampliar foto

(EFE)

El tenista chileno Nicolás Massú. EFE/Ian Salas

"Durante cuatro años he sido oro olímpico y lo asumí, ahora también asumo la derrota. En 2012 tendré 32 años. Yo quiero llegar, el físico es mi fuerte, si tengo motivación trataré de estar en Londres", afirmó el tenista que perdió frente al argentino David Nalbandián, séptimo favorito, en el torneo olímpico de Pekín.

La víspera Massu había caído en compañía de su compatriota Fernando González, con quien hace cuatro años conquistó el oro en dobles.

Ya no le quedan oros que defender y se ha acabado para él el trato de favor que suponía ser el defensor del título. Un trato de favor relativo, porque en los dos días que estuvo en competición no pisó ninguna de las canchas importantes, ni de las mayores salas de prensa.

Ahora se queda unos días para seguir disfrutando de la experiencia olímpica, para ver otros deportes y hacer todo aquello que no ha podido hacer en sus dos anteriores Juegos.

Luego vendrá el Abierto de Estados Unidos, un torneo para el que está "muy motivado" y que puede ser el de su recuperación definitiva. Porque su objetivo es volver a estar entre los mejores. "Mi carrera es más que los Juegos Olímpicos y ahora trato de seguir con mi carrera", indicó.

Massu afirmó que su caída se debe a una falta de ambición y que en las últimas semanas su juego ha mejorado. "Noto que no estoy tan lejos de jugadores del "top ten". Pude ganar un set a Nalbandian y de haberlo hecho el partido hubiera sido diferente", aseguró.

Pero le falta regularidad, encadenar buenos puntos, ganar algunos partidos para volver a estar entre los mejores. "Cuando recupere la regularidad volveré a tener un ránking muy bueno", señaló.

"Mi nivel de tenis está subiendo. Hace seis meses perdía primeras rondas que normalmente ganaba. Ahora ganó más partidos", aseguró.

La derrota ante Nalbandian le hace pensar en lo difícil que es repetir lo que logró hace cuatro años.

"Esto me sirve para darme cuenta de lo que hice, de lo difícil que es ganar en unos Juegos el doble y el individual", aseguró.

Durante unos días Massú vivió el recuerdo de su pasada relevancia. La que perdió pocos días después de entrar en el Olimpo, dos veces, en los Juegos de Atenas. La que precedió a su caída vertiginosa a los infiernos del tenis desde el paraíso del top ten.

En él entró pocos días después de su hazaña de Atenas. Entonces se convirtió en la novena raqueta del circuito y ahí toco su techo. Tenía 25 años y no ha vuelto a asomar entre los mejores.