Hutarovich se adjudica al sprint la segunda etapa de la ronda burgalesa

Burgos.-  El ciclista del Française Des Jeux, Yauheri Hutarovich, se adjudicó hoy al sprint la segunda etapa de la Vuelta Ciclista a Burgos, con un recorrido de 189 kilómetros entre Belorado y Miranda de Ebro, que completó en un tiempo de 4 horas, 13 minutos y 54 segundos.

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(EFE)

El ciclista del Française Des Jeux, Yauheri Hutarovich (d), que ha ganado al sprint la segunda etapa de la Vuelta a Burgos, es seguido por el pelotón. La etapa, de 189 kilómetros de recorrido, discurría entre las localidades de Belorado y Miranda de Ebro.

La victoria del bielorruso no evitó que su compatriota, Andrei Kunitski, del Acqua Sapone, siga portando el jersey morado que le acredita como líder de la ronda burgalesa.

Ninguno de los 142 corredores que tomaron la salida en Belorado afrontó con tranquilidad esta segunda etapa, la más larga de las cinco ya que, al paso por la Meta Volante de Cerezo de Río Tirón, y en la que puntuaron Weylandt (Quick Step), Eloy Teruel (Contentpolis Murcia) y Chistophe Edaleine (AG2R), el adelanto sobre el mejor tiempo previsto era ya de cinco minutos.

El fuerte ritmo con el que se rodo no impidió que, en el kilómetro 28 de etapa, Daniel Moreno (Caisse D'Epargne), Carlos Castaño (Karpin Galicia), Josep Jufre (Scott), Daniele Contrini (Tinkof), Sarabia (Extremadura) y Diego Gallego (Burgos Monumental), rompieran la unidad del grupo y empezaran a establecer las primeras diferencias significativas con el pelotón.

Pese al control que ejercían los hombres del Acqua Sapone en el grupo, el buen entendimiento entre los seis corredores que transitaban en cabeza fue más que suficiente para que puntuaran tanto en las metas volantes de Briviesca y Frías, como en el Alto de Portillo de Busto (Segunda Categoría).

Tal era el ritmo que impusieron estos seis hombres que, en la primera hora de carrera, consiguieron una media de 49,600 kilómetros por hora, por lo que al paso de la localidad de Quintanaláez, en el kilómetro 50, el adelanto sobre el mejor horario previsto por la organización era de 20 minutos.

Si el entendimiento en el grupo de cabeza era bueno, también funcionó a la perfección entre los hombres del Acqua Sapone, equipo del líder, y los de Euskaltel-Euskadi que, dueños y señores del pelotón, mantuvieron controlados a los seis hombres de cabeza, acelerando la marcha cuando las diferencias pasaban de los tres minutos y medio.

Las altas temperaturas y el cansancio lógico debido al fuerte ritmo con el que se rodó desde el principio, hizo que la velocidad media en la segunda hora de carrera bajara hasta los 45 kilómetros por hora.

La segunda y última dificultad montañosa de la jornada, el Alto Barcina de los Montes (Tercera Categoría), situado en el kilómetro 105, sirvió para que el burgalés Diego Gallego (Burgos Monumental), se hiciera con el jersey rojo que le acredita como líder de la Clasificación General de la Montaña.

Fue a partir del paso por Frías cuando el pelotón, donde ya tiraban además del Acqua Sapone y Euskaltel, Mitsubishi y Milram, incrementó la marcha y fue recortando la desventaja que mantenían con los seis hombres de cabeza rebajándola, de los 3'45 "que consiguieron al paso por el último premio de la montaña, a los 2'28" en Barcina del Barco, a 58 kilómetros de la línea de meta.

La aventura en solitario de los seis protagonistas de la jornada llegó a su fin a falta de 10 kilómetros para meta, cuando el pelotón comenzaba a preparar la llegada a los sprinters para que fueran ellos los que se jugaran la victoria en la línea de meta de Miranda.