Daniel Morillo, el 'Robin Hood' español en Pekín

Pekín.-  Daniel Morillo, un ibicenco de tan sólo veinte años, se ha convertido en el 'Robin Hood' español en Pekín, en el único representante en tiro con arco que cuenta las horas que le quedan para estrenarse en los Juegos entre la alegría de poder participar y el sueño de, por qué no, disponer de la opción de luchar incluso por las medallas.

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(EFE)

El español Daniel Morillo Prats, durante una rueda de prensa hoy, a dos días de la inauguración oficial de los Juegos Olímpicos.

Nacido el 21 de enero de 1988, Morillo se clasificó a última hora para Pekín gracias a su quinto puesto en Boe (Francia), la última que significaba el billete olímpico. "Nos hizo sufrir mucho", reconoce Lola Tello, directora técnica de la federación nacional.

El pupilo del surcoreano Kyu Mo Cho, que en la capital china contará con el apoyo técnico de su hermano Carlos Morillo, noveno en los Europeos en pista cubierta de Turín'08 y que en los Mundiales de Leipzig'07 cayó en la primera ronda ante el ruso Ilia Sidorin, vive ahora su primera experiencia olímpica ya con ansias de comenzar, aunque con su serenidad habitual.

"En todos ocurre, pero en este deporte, que es muy técnico, la cabeza es fundamental", consideró Tello, y así se muestra otro joven producto del deporte balear, aunque lejos de los focos de paisanos ilustres como el propio Rafa Nadal.

Para Daniel Morillo es un premio compartir la Villa y haber podido cruzarse con grandes como Pau Gasol o el propio Nadal. De momento no ha hablado con ellos, pero tiene previsto hacerlo. No como ídolos, sino de igual a igual, como reconoció a Efe.

Sus ojos desprenden desde timidez hasta una ilusión desbordante, pero mantiene la tranquilidad. Pasa de afirmar que intentará aprovechar esta experiencia para los próximos Juegos de Londres a dejar entrever el sueño de luchar por el podio.

"Lo primero es disfrutar de estos Juegos para aprender para los próximos. Estaré contento de acabar entre los 16. Si así ocurre luego habrá que luchar por lo máximo. Todo deportista sueña con tirar en una final olímpica. Sería alucinante, Pero hay que ser realista e ir poco a poco. Está claro que no soy favorito", comentó Morillo, que de superar los octavos de final rebasaría la marca establecida por la madrileña Almudena Gallardo en Atenas'04, cuando cayó ante la griega Evangelina Psarra en dicha ronda.

Su condición de novato le hace distar mucho del italiano Ilario Di Buo, que disputará sus sextos Juegos a partir del sábado tras debutar en Los Angeles y perderse solamente Atlanta'96, o del británico Alison Williamson, la también italiana Natalia Valeeva y el estadounidense Richard Johnson, quienes afrontan su quinta cita olímpica.

Daniel Morillo disfruta de estar junto a ellos en una competición "que se nota que es especial" y a la vez de unas instalaciones de primera magnitud muy superiores a las que dispone en el CAR de Madrid e incluso en su Ibiza natal que se ha convertido en el nuevo vivero del tiro con arco español porque otros compañeros, a los que echa "de menos", también integran el equipo nacional.

Estudiante de Fisioterapia, tiene, como casi todos los arqueros, la referencia de los surcoreanos, los grandes de este deporte. "Allí son profesionales, con una cantera excepcional que incluso cobran 3.000 euros al mes", indicó.

"Nosotros, en cambio, en España somos un deporte minoritario que debería crecer a nivel social y a nivel de reconocimiento, que es difícil, hay que intentar poco a poco sacar resultados para que vaya apareciendo en los medios de comunicación", señaló el ibicenco.

Las otras referencias cercanas de los tiradores actuales son los componentes del equipo que logró el oro en Barcelona'92, Antonio Vázquez Megido, Juan Carlos Holgado y Alfonso Menéndez.

Holgado es actualmente director de eventos de la Federación Internacional y delegado técnico de la competición de Pekín 2008, y Vázquez vive y trabaja en el grupo de Ibiza.

Las deficientes instalaciones en las que trabaja tanto en Madrid como en Ibiza, respecto a las que se encuentra en las competiciones, no han sido un obstáculo para su ambición y bajo la dura batuta de Cho puede contar las horas que le faltan para disputar el sábado la clasificación, en la que lanzará dos tandas de 32 flechas, antes de que comiencen las eliminatorias.

Será el que represente a toda esa generación de jóvenes que comienzan a despuntar en recurvo -la modalidad olímpica-, como Felipe López, Elías Cuesta, Raúl Riera y Andres Gómez, y que alimentan la selección y sus ambiciones de futuro.

Seis siglos después, lejos de los bosques reales de Sherwood donde Robin Hood se convirtió en el legendario personaje que robaba a gobernantes y eclesiásticos para entregar el botín a los necesitados y oprimidos, y a diez mil kilómetros de distancia de aquellos parajes, Morillo luchará por ser un héroe para los arqueros españoles y un antihéroe para el poder establecido, es decir, Corea del Sur y las demás potencias.