Casi 250 obras, 4 de Goya, recrean el universo del primer ministro de Carlos III y IV

Murcia.-  Casi 250 obras, cuatro de ellas de Goya, recrearán el universo político, artístico, económico y científico de José Moñino, conde de Floridablanca, primer secretario de Estado español desde 1777 a 1792, durante los reinados de Carlos III y Carlos IV, con una exposición en Murcia, donde nació, y en Madrid.

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La muestra, que conmemora el bicentenario de su muerte, fue presentada hoy en Murcia con el título "Floridablanca (1728-1808), la utopía reformadora", y podrá verse en esta ciudad del 18 de septiembre al 8 de diciembre, y en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, de Madrid, del 22 de diciembre al 22 de febrero.

Coproducida por la fundación Cajamurcia, la sociedad estatal de Conmemoraciones Culturales, las consejerías murcianas de Cultura y Turismo, la academia madrileña y el ayuntamiento de Murcia, acogerá los retratos que Goya hizo a Fernando VII (del Thyssen-Bornemisza), a Floridablanca y a la reina María Luisa (del museo del Prado), y al marino José de Vargas Ponce (de la Academia de la Historia).

Habrá también obras de Batoni, Mengs, Ferro, Bayeu, Vergara, Houasse, Flaugiers y Giaquinto, así como una colección de monedas y medallas del siglo XVIII de los museos arqueológicos de Madrid y Lorca (Murcia) y de la Casa de la Moneda, pinturas del museo de Versalles, cristal de La Granja, relojes de la Real Fábrica, piezas de porcelana del Retiro y Meissen, y hasta la cuna de Fernando VII.

Las piezas de la muestra llegarán también de Patrimonio Nacional, los archivos generales de Simancas y de Indias, las catedrales de Sevilla, Valencia, Toledo y Salamanca, la Biblioteca Nacional, los museos de Bellas Artes de Sevilla, de Francia e Italia.

Se trata de dibujos, documentos, pinturas, porcelanas, libros, joyas y esculturas que recrean sus años de abogado en la Corte, como fiscal del Consejo de Castilla, desde donde actuó contra los instigadores del motín de Esquilache en Cuenca y apoyó la consiguiente expulsión de los jesuitas de España en 1767.

Nombrado embajador en Roma en 1772, a Moñino le correspondió canalizar las tensas relaciones de Carlos III con el Papado, y allí logró suprimir la Compañía de Jesús en 1773, gestión por la que fue nombrado conde y luego secretario de Estado (primer ministro), cargo desde el que manejó la política interior y exterior de 1777 y 1792.

El comisario de la muestra, Cristóbal Belda, hizo mención en el acto de presentación al impulso que Floridablanca dio a la prensa, que perseguiría cuando estalló la Revolución Francesa, a las expediciones científicas, al avance cultural y del saber, a las infraestructuras y a las reformas económicas y de la enseñanza.