El juez cree que la junta directiva obró "de buena fe" al consultar a la LFP

Barcelona.-  La directiva del Barcelona no tendrá que avalar el 15% del presupuesto de la próxima temporada (53'3 millones de euros), porque obró "de buena fe" al consultar a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) si debía prestar aval al inicio de su segundo mandato y ésta se pronunció "por la no necesidad" del mismo, según la sentencia del juzgado de primera instancia número 24.

El magistrado Antonio Pascual Nuño de la Rosa cree que este hecho es definitivo para desestimar la demanda de un socio del club catalán que solicitaba que se declarara nula la toma de posesión del último mandato de Joan Laporta o, subsidiariamente, se obligase a él y a su junta a avalar el 15% del presupuesto.

Nuño de la Rosa señala que la función de la LFP, según la Ley del Deporte, "es trascendente a los efectos de este pleito, por cuanto la actual normativa le otorga funciones de control y exigencia de la fianza por parte de los directivos".

"Por lo tanto, si la Liga de Fútbol Profesional informó en reiteradas ocasiones, y tras sopesar los antecedentes remitidos sobre la situación económica del Barça debidamente auditados, de que no era necesaria la prestación de aval por la junta directiva del señor Laporta, es llano que, por una interpretación emanada del órgano competente, tal junta, en principio, no estaba obligada a prestar el aval", argumenta el juez en la sentencia.

En sus ocho primeros días en el cargo, los mismos que otro juzgado determinó que correspondían a un año de mandato, Laporta y sus directivos cerraron el ejercicio 2002-03 con 164 millones de pérdidas.

Sin embargo, el titular del juzgado número 24 de la capital catalana señala en la sentencia que se ha dado a conocer hoy que "no resulta trascendente" que el primer año de mandato del señor Laporta deba comprender el corto interregno transcurrido en los nueve días que van del 22 al 30 de junio de 2003" pues, de cara al ejercicio económico, "las obligaciones hubieran sido prácticamente las mismas con independencia de ese transcurso temporal".

El magistrado recuerda que, pese cerrar aquel primer ejercicio con un déficit de 164 millones que la junta directiva de la entidad azulgrana siempre ha achacado a los mandatos de Joan Gaspart y Enric Reyna, "consiguió finalmente en los sucesivos ejercicios arrojar resultados positivos", concretamente unos 71 millones de euros sumando las tres primeras temporadas.

Nuño de la Rosa entiende que los informes periciales presentados por la parte demandante "no han demostrado que la junta tratare de evadir esa obligación de prestar el aval" ni que, "a la luz de las cuentas debidamente auditadas y resultados posteriores en conexión con la normativa en vigor, lleven a concluir la necesidad de prestación del aval".