Las elecciones en Chuquisaca son clave para Bolivia, según un candidato oficialista

La Paz.-  Los comicios del próximo domingo para elegir al prefecto (gobernador) de la región sureña de Chuquisaca suponen un momento clave para la democracia en Bolivia, dijo hoy Wálter Valda, candidato por el partido del presidente Evo Morales.

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(EFE)

El próximo domingo se realizarán los comicios para elegir al prefecto (gobernador) de la región boliviana de Chuquisaca.

En entrevista con Efe, el aspirante por el gubernamental Movimiento Al Socialismo (MAS) aseguró que los comicios en Chuquisaca llegan en un momento de profunda crisis política en Bolivia, por lo que "no son una simple elección de prefecto".

A juicio de Valda, sociólogo de 55 años, Bolivia se encuentra "agobiada" por el conflicto entre el proyecto constitucional que impulsa Morales y el proceso autonomista desarrollado en las regiones de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija, gobernadas por opositores al presidente izquierdista.

Chuquisaca acudirá a las urnas para elegir a su gobernador, ya que el anterior, David Sánchez, huyó a Perú tras los incidentes de noviembre de 2007 en Sucre (la capital departamental), donde hubo tres muertos y unos 300 heridos en violentos disturbios relacionados con el proceso constituyente promovido por Morales.

Tras la huida de Sánchez, Morales nombró un prefecto interino, Ariel Iriarte, que ha recibido el rechazo frontal del opositor Comité Interinstitucional de Chuquisaca.

Ese grupo ciudadano promovió un cabildo para designar una prefecta "alternativa", la indígena quechua Sabina Cuéllar, que competirá con Valda por hacerse con la gobernación departamental en los comicios del domingo.

Valda recalcó que esas elecciones se producirán en un "momento decisivo en el proceso democrático del país", porque su resultado "o reafirma la posición del Gobierno o la complica y hace más fuerte a la oposición".

El clima político que rodea a estos comicios ha marcado mucho más el ambiente electoral que las propuestas para el desarrollo de Chuquisaca, admitió Valda, cuyo programa se sustenta en "demandas históricas para un departamento olvidado", como un nuevo aeropuerto y, sobre todo, la "vertebración" de carreteras.

El aspirante del MAS reconoció también que, si gana la candidata de la oposición, Morales habrá perdido el que fuera uno de sus "bastiones" políticos antes de los hechos violentos de noviembre del pasado año y la resistencia a su Gobierno se ampliará a más de la mitad del país.

En noviembre de 2007, la Asamblea Constituyente aprobó en Sucre en primera instancia el proyecto de nueva Carta Magna, en medio de fuertes protestas de sus habitantes porque el foro no debatió la demanda de la ciudad de volver a albergar todos los poderes del Estado.

Sucre, donde se fundó la República de Bolivia en 1825, es sede del Poder Judicial, mientras que el Ejecutivo y el Legislativo están en La Paz desde la guerra civil de finales del siglo XIX.

Los disturbios de noviembre pasado han generado una relación conflictiva entre Morales y los líderes cívicos de Chuquisaca, que incluso han impedido, con manifestaciones violentas, que el jefe de Estado y sus ministros visiten Sucre en actos oficiales.

En mayo pasado, grupos de ciudadanos se movilizaron en las inmediaciones del aeropuerto para impedir la llegada de Morales y se produjeron choques con campesinos afines al mandatario indígena, que fueron despojados de sus ropas y maltratados en la plaza principal de la ciudad.

"Mi candidatura puede unir otra vez a los chuquisaqueños. Es una necesidad de pacificar, reconciliar y establecer el equilibrio que había siempre entre campo y ciudad, porque ambos se necesitan", recalcó Valda, convencido de que tiene un gran apoyo para las elecciones del domingo.