Felipe Massa ha encabezado el doblete de Ferrari en el circuito de Magny-Cours, sede del GP de Francia, con lo que releva a Robert Kubica como líder del mundial. Jarno Trulli completó el podio con su Toyota, después de resistir los ataques de Kovalainen y Kubica durante buena parte de la carrera. Los Renault, cuya estrategia fue poco acertada, cerraron una nefasta actuación en casa en séptima y octava posición, con Nelsinho Piquet por delante de Fernando Alonso.
Llovió ligeramente en la fase final de la carrera, pero ni así el GP de Francia abandonó su etiqueta de aburrido. La táctica y la dificultad para adelantar volvieron a ser la moneda corriente, lo que convirtió a la cita de Magny-Cours en lo más parecido a un partido de fútbol que acaba en empate a cero. No gana nadie, pero quienes entienden de movimientos de jugadores, diagonales, esquemas defensivos y demás se divierten…
La carrera dio comienzo con una salida limpia, aunque cargada de movimientos de piezas en el tablero. Alonso entregó dos posiciones a Jarno Trulli y Robert Kubica, antes de deshacerse del polaco en la horquilla de Adelaida. Por detrás, Piquet consiguió contener a los dos McLaren con un excelente cambio de trayectoria en la arrancada. Delante, Räikkönen y Massa se escapaban hacia un doblete casi asegurado. Lewis Hamilton, por su parte, se autoexpulsó de la zona de puntos al adelantar a Vettel saltándose la curva siete del trazado, acción sancionada con un paso por boxes sin detención (Drive Through). La FIA comunicó al inglés el veredicto en la vuelta 12. Segundo error relativo al código deportivo en dos carreras del líder de McLaren.
El transcurso de los giros fue poniendo en evidencia la errada estrategia de Renault con Alonso. El equipo galo, más centrado en obtener una pole mediática el sábado, optó por una carga de carburante muy ligera en la Q3, lo que dejó a su piloto abocado a detenerse siempre antes que sus rivales. Y esto, en Magny-Cours, equivale a derrota segura. Es más, su R28 apenas podía contener el ritmo de un Trulli pletórico, que se escapaba del bicampeón mundial a un ritmo de tres décimas por vuelta. Por detrás, Nelsinho Piquet protagonizaba las mejores acciones del GP, logrando contener con oficio de veterano los ataques de los dos McLaren. Sin quererlo, el brasileño, cuyo tanque rebosaba de carburante, estaba partiendo la carrera en dos mitades.
Como era de esperar, Alonso abrió el turno de paradas en el 16º paso por meta, reincorporándose en duodécimo lugar, tras el BMW de Heidfeld y por delante del McLaren de Hamilton. El inglés se zafó de su antiguo compañero en una espectacular maniobra en el curvone de Estoril antes de detenerse para su primer repostaje. Sin embargo, la verdadera prueba del error de los estrategas de Renault quedó clara con la detención de Trulli, Kubica, que pasaron por su box cuatro vueltas después. Y encima no serían los únicos en robarle la cartera. Mark Webber, detenido en el 23º giro, también hizo caer al ovetense una plaza más, con lo que quedaba relegado al séptimo puesto.
Nelsinho Piquet y Heikki Kovalainen, que batallaban desde el inicio de carrera, se detuvieron en la vuelta 25. Los mecánicos de Renault fueron más rápidos y enviaron a la pista a su piloto por delante del rival. Sin embargo, en una más que probable equivocación con los botones de su volante, Nelsinho puso su coche en punto muerto y dejó pista libre a Kovalainen. Esta acción determinaría, sin quererlo, el final del GP de Francia.
¿Y los Ferrari? A lo suyo, con Kimi Räikkönen por delante de Massa tras el primer turno de repostajes. El gran susto para la rossa llegaría cuando, a partir de la vuelta 35, el líder empezó a ceder tiempo. ¿El motivo? La rotura de uno de los escapes de su F2008, avería que mermó las prestación de cuatro de los ocho cilindros de su mecánica o, en otras palabras, le hizo perder unos dos segundos por vuelta. Massa aprovechó la circunstancia para arrebatar a su compañero la cabeza y escaparse hacia la octava victoria de su carrera deportiva. Räikkönen, por su parte, tuvo suficiente con la ventaja acumulada respecto al tercer clasificado, Jarno Trulli, para acabar en segundo lugar.
El segundo turno de paso por los boxes volvió a encabezarlo, en la vuelta 42, Fernando Alonso, que rodaba a buen ritmo hasta entonces a la caza de Trulli y Kubica. El asturiano montó las gomas blandas y cargó gasolina suficiente hasta la bandera a cuadros, regresando a pista exactamente igual que en el repostaje anterior. Sí, y luego ocurrió lo mismo: Hamilton le adelantó en la pista y Webber hizo lo propio en los boxes. A esas alturas, el puntal de Renault veía que tendría que conformarse con la séptima plaza…
Los segundos repostajes de Kubica y Kovalainen favorecieron sobremanera al segundo, que ganó la posición al líder del mundial para lanzarse a la caza de Trulli. Y consiguió atraparle, aunque la veteranía del piloto de Pescara fue suficiente para regalarle a Toyota su primer podio después de dos temporadas de sequía (el último cajón de la escudería nipona nos remonta al lejano GP de Australia de 2006, con Ralf Schumacher como protagonista). Detrás del dúo italo-finés concluyeron Kubica, al volante de un coche que no se adaptaba a la pista (prueba irrefutable: Heidfeld acabó en 13º lugar); Mark Webber, Nelsinho Piquet y Fernando Alonso. Sí, han leído bien… En su enésimo intento por adelantar a Webber, el asturiano se pasó de frenada en la horquilla de Adelaida, regalando el séptimo puesto a su compañero, que, por cierto, marca a lo grande los primeros dos puntos de su carrera deportiva. Fernando, al menos, entra con su puntito del octavo puesto en el selecto club de los 500 puntos, hito estadístico que sólo han conseguido alcanzar los más grandes de este deporte.
El mundial de F-1 abandona Francia con Felipe Massa como líder por primera vez en su carrera deportiva. El brasileño aventaja en dos puntos a Robert Kubica y en cinco a Kimi Räikkönen. Hamilton, que sumó su segundo cero consecutivo (circunstancia inédita en su corto historial), está ya a diez puntos de Massa.
Silverstone, sede del GP de Inglaterra, marcará el paso del ecuador del certamen el próximo 6 de julio.
Consulte la clasificación del GP de Francia y la del mundial.
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No creo que la pasada de frenada de Alonso fuese por intentar adelantar a Webber, +
Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.
Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...
Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.
A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Citar este verso de Machado no puede ser más ocurrente al hablar de Mariano Rajoy. Tras la renuncia de Zapatero y las voces que señalan que la estrategia popular podría verse dañada, es necesario preguntarse algo. ¿Ha hecho camino Rajoy? ¿Se ha preparado para ser presidente? Quizás la respuesta sorprenda.
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