Baleares crea "el pabellón de los hexágonos", con una estructura reutilizable

Zaragoza.-  Baleares ha decidido traer a Zaragoza un mecano, una estructura totalmente desmontable y reutilizable de 380 metros cuadrados que pretende ser conocida como el pabellón de los hexágonos, en homenaje a la forma de la molécula del agua y a la estrecha relación que las islas mantienen con este bien.

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(EFE)

Varios operarios trabajan en el pabellón de Islas Baleares de la Exposición Internacional de Zaragoza 2008 que se celebrará del 14 de junio al 14 septiembre.

A dos semanas escasas de la inauguración de Expozaragoza 2008, que tendrá lugar el próximo 13 de junio, el pabellón de Baleares aún está desnudo y no es más que un esqueleto, con andamios, cables, tablones de madera, tornillos y demás entresijos a la vista.

Sin embargo su arquitecto, Vicenç Mulet, asegura que el próximo 5 de junio todo estará listo para poner en marcha el período de pruebas, que permitirá tener todo el pabellón a punto para la inauguración de este evento internacional que se celebrará en Zaragoza con la participación de más de un centenar de países.

En una visita guiada a periodistas por el pabellón, Mulet ha explicado que aunque a simple vista el pabellón parezca estar aún en pañales, tan sólo falta vestirlo. "Literalmente, su interior se cubrirá con una estructura textil, toda una serie de telas de diferentes colores que reflejarán unas proyecciones que mostrarán la realidad de las islas".

Construido con materiales no tóxicos ni contaminantes, el pabellón es completamente desmontable, con el fin de que una vez terminada la exposición, éste pueda ser trasladado íntegro a Baleares, donde se decidirá qué uso darle.

"El pabellón de los hexágonos" es el primero que el visitante se encuentra nada más llegar a Expozaragoza, una ubicación "ventajosa", según el arquitecto ya que, además de estar justo enfrente del pabellón de España, le da la oportunidad de ejercer de pabellón de acogida, receptor que encamina a los visitantes al resto de la exposición.

Baleares comparte recinto con Valencia, Murcia y Cataluña y, como elemento diferenciador de éstas y del resto de participantes, la comunidad ha elegido una fachada "atractiva" compuesta a modo de mosaico construido con hexágonos en tonos azules, plata y dorados, evocando la imagen de una playa del mediterráneo.

El objetivo es que el pabellón de Baleares de la bienvenida al visitante, lo introduzca a través de una zona de entrada, los divida en grupos de unas veinte personas y los lleve a realizar un viaje por las islas sin palabras, solo con sensaciones: vista, oído y olfato.

"Queremos explicar nuestra historia, nuestra realidad con emociones", ha indicado el arquitecto, que ha detallado que la estructura se divide en tres partes básicas, en las que se jugará en todo momento con los sentidos, para exponer cómo el agua ha ido dando forma a las islas y al carácter de sus ciudadanos.

La parte fundamental esconde "una sorpresa": una enorme cisterna en el techo que evoca las antiguas infraestructuras de almacenamiento de agua que todavía existen en algunas zonas de las islas, donde se harán proyecciones de 360 grados que se complementarán con sonidos y olores específicos del archipiélago.

Además, en una zona de restauración, ubicada bajo el pabellón, se ofrecerán comidas típicas de Baleares. Según ha explicado la consellera balear de Comercio, Francesca Vives, se ha acordado con todas las denominaciones de origen de las islas que estén presentes en la exposición.