La Junta birmana muestra la cara bonita del referéndum para ocultar el drama

Ni niños llorando por falta de alimentos, ni padres velando el cadáver de sus hijos, ni la desesperación de la nada. La Junta Militar de Birmania ha apostado por la imagen idílica de unos sonrientes birmanos, habitantes de la región más castigada por el ciclón 'Nargis', votando el referéndum que consolidará la dictadura. Son los supervivientes de Rangún y los municipios del delta del río Irrarawaddy que no acudieron a votar el pasado 10 de mayo.

Varios birmanos votan en el referéndum celebrado hoy en Rangún.

Sólo 14 días después de la mayor tragedia que ha vivido el país en décadas (con 134.000 muertos y desaparecidos), los mismos militares que impidieron la entrada de ayuda internacional y ocultaron la magnitud del desastre a la población en los primeros días han celebrado la consulta constitucional en las localidades más afectadas por el ciclón. Cerca de cinco millones de birmanos de Rangún y otros 48 municipios han sido llamados a votar, después de que el devastador 'Nargis' aplazara la consulta el pasado 10 de mayo. En el caso de aquellos habitantes que se encontraran aislados u hospitalizados, los soldados y funcionarios se han esforzado por acercarles las urnas.

Las imágenes distribuidas por el régimen muestran a hombres, mujeres y ancianos, -acompañados de niños-, depositando su papeleta mientras esbozan una gran sonrisa. Algunos de ellos llevan pintadas sus caras con el 'thanaka', el tradicional cosmético birmano que utilizan para decorar sus rostros y cuerpos, que además les protege del sol. Nada, por tanto, de la desesperación de una población a la que, después de dos semanas, todavía no ha llegado alimento alguno. Según denuncian las pocas agencias internacionales que pueden operar en la región, la población corre el riesgo inmediato, "en algunos casos puede ser cuestión de horas", de sufrir epidemias de hambruna y desnutrición.

Tampoco se han visto imágenes de las extraordinarias medidas de seguridad desplegadas por las calles de Rangún (antigua capital del país) en las últimas horas. Miles de policías y soldados custodian prácticamente cada esquina de la ciudad, armados con porras, escudos y gas lacrimógeno, según informan varias agencias de noticias. Se trata de la mayor movilización de tropas desde septiembre del año pasado, cuando se produjeron las protestas de monjes y estudiantes a favor de la democracia en el país y en contra de la subida abusiva de precios.

El borrador constitucional que se vota hoy ya fue aprobado en la primera fase del referéndum por el 92,4% de los votos válidos emitidos, según anunció la propia Junta Militar. La oposición interna y externa considera que los militares han manipulado la consulta para convertirla en un mero trámite para "institucionalizar" el actual régimen dictatorial.