El ex director de Inteligencia de Ecuador dice que aún hay mucha información sin procesar

Quito.-  El ex director de Inteligencia del Ejército de Ecuador Mario Pazmiño aseguró hoy que "hay mucha información", aún no procesada, relacionada con las tres supervivientes del bombardeo militar colombiano, el pasado 1 de marzo, a un campamento que las FARC habían instalado en territorio de este país andino.

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(EFE)

Pazmiño, quien fue relevado del cargo tras duras críticas del jefe de Estado, Rafael Correa, por fallas en la entrega de la información sobre el caso, reapareció hoy, por segundo día consecutivo y desde la clandestinidad, en una entrevista con la televisión local Teleamazonas.

Pazmiño, quien fue relevado del cargo tras duras críticas del jefe de Estado, Rafael Correa, por fallas en la entrega de la información sobre el caso, reapareció hoy, por segundo día consecutivo y desde la clandestinidad, en una entrevista con la televisión local Teleamazonas.

Consultado sobre mayores datos de Lucía Morett, la mexicana que fue rescatada con vida del campamento y que asegura que no es guerrillera sino estudiante de ciencias sociales, Pazmiño se limitó a decir que aún hay mucho material que procesar.

"Existe mucha información con relación a este caso que tiene que ser analizada y procesada. Yo estoy un poco desvinculado al momento, pero sé que existe bastante información interesante sobre este tema que sería para otra entrevista", indicó Pazmiño.

Reiteró que antes del 1 de marzo no tenían información sobre el campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), donde estaba el portavoz internacional de ese grupo, alias "Raúl Reyes", quien falleció, junto a otras 25 personas, en el ataque, por lo que señaló que el caso los tomó "por sorpresa".

Asimismo, indicó que el ecuatoriano Franklin Aisalla, quien murió en el ataque y que había sido investigado desde 2003 por militares y policías por presuntos vínculos con las FARC, no era en ese momento "objetivo de investigación".

Pazmiño fue esquivo al contestar sobre la presunta presencia, en marzo pasado en Ecuador, del mexicano Dagoberto Díaz, aparentemente vinculado a las FARC y de quien se dijo que había visitado en el hospital a su compatriota Morett y las dos ciudadanas colombianas, Doris Bohórquez y Martha Pérez, rescatadas del campamento.

"Sería interesante que vayan al Hospital Militar (donde estuvieron ingresadas las tres supervivientes), pidan el registro de ingresos a la habitación de las detenidas y de pronto se encuentra con un sinnúmero de sorpresas ahí", se limitó a decir.

Pazmiño, que tras las críticas gubernamentales ha pedido la baja de la institución militar, consideró hoy que reestructurar el departamento de Inteligencia Militar, como lo ha anunciado el jefe de Estado, sería una "falla garrafal".

Tras recordar que él dirigió ese departamento durante medio año, añadió que "al momento el sistema de Inteligencia tiene un objetivo nacional e institucional y mal harían en transformar la Inteligencia Militar en un ente de carácter político", señaló.

Pazmiño aseguró ayer en Teleamazonas que no se ocultó información al gobernante sobre las investigaciones que se realizaron tras el ataque colombiano y tampoco sobre el caso Aisalla.

Según Pazmiño, quienes no proporcionaron la información de manera oportuna al jefe de Estado fueron algunas autoridades superiores, las cuales "no consideraron importante" los datos proporcionados por inteligencia en el caso Aisalla.

Pazmiño dijo que el pasado 11 de marzo entregó a sus mandos superiores un informe de 45 páginas en el que se detalla cómo sucedieron los hechos en el lugar del bombardeo por parte de tropas colombianas y se enumeran los objetos que se encontraron en el sitio.

Según Pazmiño, en ese informe se da a conocer el hallazgo de una papeleta de votación de Aisalla que, en principio, asumieron como una falsificación.

El pasado 9 de abril el presidente Correa decidió cambiar al entonces ministro de Defensa, Wellington Sandoval, así como a los jefes del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y al comandante del Ejército, por los fallos en el proceso de información respecto a la crisis con Colombia.