Díaz Tezanos dice que el nuevo bachillerato es equilibrado y acorde al mundo actual

Santander.-  Cantabria ya ha definido el nuevo modelo de bachillerato que comenzará a impartir el próximo curso escolar y que, según la consejera de Educación, Rosa Eva Díaz Tezanos, es "equilibrado en su conjunto" y "permite una formación plenamente adecuada a las exigencias del mundo actual".

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(EFE)

Cantabria ya ha definido el nuevo modelo de bachillerato que comenzará a impartir el próximo curso escolar y que, según la consejera de Educación, Rosa Eva Díaz Tezanos (en la imagen), es "equilibrado en su conjunto".

Este bachillerato llegará en septiembre solamente a las aulas de primer curso, mientras que los nuevos contenidos de segundo se implantarán en el año académico 2009-2010, por lo que cabe la posibilidad de incorporar cualquier cambio organizativo que se pueda producir hasta entonces.

Díaz Tezanos ha subrayado hoy, en rueda de prensa, que el modelo por el que ha optado Cantabria, y que se recogerá en un decreto que se publicará "de inmediato", es fruto de "una reflexión profunda y contrastada".

La reforma responde a que la Consejería de Educación ha tenido que adaptar el bachillerato que se impartía hasta ahora en las aulas de la comunidad autónoma a las exigencias de la Ley Orgánica de Educación (LOE).

Según el decreto que desarrolla esta norma, el Ministerio de Educación decide el 65 por ciento de los contenidos que se imparten en esta etapa educativa y a Cantabria le corresponde definir el 35 por ciento restante.

El nuevo modelo ofrece tres modalidades en lugar de las cuatro que se impartían hasta ahora y así, los alumnos que continúen sus estudios tras finalizar la ESO podrán elegir entre el Bachillerato de Humanidades y Ciencias Sociales, el de Artes (con dos ramas, Artes Plásticas, Diseño e Imagen y Artes Escénicas, Música y Danza) y el de Ciencias y Tecnología.

En este último se aúnan el Tecnológico y el de Ciencias Naturales y de la Salud,ha recordado la consejera, quien ha explicado que, tras sopesar distintas opciones y después de un periodo de consultas, se ha decidido mantener la carga lectiva de treinta horas semanales.

Para encajar la nueva materia común que se introduce en el currículo de primer curso con dos horas semanales, Ciencias para el Mundo Contemporáneo, se ha decidido quitar una hora de tutoría y desdoblar las dos horas de religión que se tienen que impartir de forma obligatoria a lo largo del bachillerato.

De esta forma, habrá una hora de esta asignatura en primer curso y otra en segundo. Lo que se ha hecho, según Díaz Tezanos, es adaptar la religión al nuevo currículo pero no se le ha restado carga lectiva.

La Consejería llegó a barajar la posibilidad de pasar esta materia a horario de tarde, pero finalmente se descartó esa opción porque es ilegal.

Otra de las polémicas que ha desencadenado la reforma del Bachillerato es la carga horaria de la asignatura de Historia de España, que se imparte en segundo curso y que ha llevado al profesorado de esta asignatura a movilizarse.

La titular de Educación ha insistido en que en Cantabria tendrá tres horas semanales, una más de la que establece el decreto como mínimo horario y las mismas que se impartirán en otras diez comunidades autónomas.

Díaz Tezanos ha dicho que su departamento ya ha trasladado el nuevo modelo de Bachillerato a los profesores de Historia, que han amenazado con no evaluar a los alumnos si no se atienden sus demandas.

Educación confía en la responsabilidad de estos docentes y, según el director general de Centros, Ramón Ruiz, no le cabe duda de que el derecho a la evaluación que tienen los alumnos va a estar garantizado.

En la decisión de la Consejería ha pesado el hecho de que en las pruebas de acceso a la universidad los estudiantes pueden elegir entre examinarse de Historia de España o de Historia de la Filosofía, asignatura que tendrá el mismo peso horario, tres horas.

Además en Cantabria se ha introducido una materia optativa, Investigación en Ciencias Sociales con cuatro horas semanales, que, a juicio de Díaz Tezanos, puede servir para complementar la formación que reciben los alumnos en Historia de España y también hará que el profesorado de esta materia no pierda horas.