El ibérico también entra en crisis

A los ganaderos extremeños les crecen los enanos. Por un lado, la demanda de los últimos años ha desembocado en la actual superproducción del porcino ibérico en toda España. Esto ha hecho que el precio del producto haya bajado considerablemente. Por otro, la crisis alimentaria ha disparado el precio de los cereales, y por tanto, el del pienso y el del coste de producción. Los beneficios son mucho más bajos que los gastos que supone criar un animal y es por eso por lo que han optado por atajar individualmente el problema. La Asociación de Productores de Cerdo Ibérico de Extremadura ha anunciado que a lo largo de los próximos meses disminuirá en un 50% su producción. Así, por lo menos, reducirán las pérdidas. El ganado sacrificado saldrá a la venta la próxima semana a precio de coste.

(EFE)

Extremadura regulará la producción de cerdo ibérico.

Para entender el porqué de estas iniciativas, que podría beneficiar al resto de los productores españoles, hay que fijarse en tres puntos. Y es que, lo que pretende la asociación, constituida en el mes de agosto pasado, es reducir el mayor número de gastos para hacer frente a esta situación.

La escalada de los cereales

Quien haya dicho que la aparición de los biocombustibles no afectaba a España, y que ni siquiera lo iba a hacer en un futuro, se equivocaba. Lo lleva haciendo casi dos años. Porque como dice José Manuel Álvarez, gerente de ACCOE (Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España), "estamos en una aldea global y lo que haga uno afecta al resto". Por eso, entre los biocarburantes, el aumento de la demanda en los países emergentes y las malas cosechas en algunos lugares, los cereales se han disparado. Esta escalada de precios ha desembocado en la subida del pienso y por tanto, en el coste de crianza del ganado.

En España, desde julio de 2006 hasta enero de 2008 el trigo blando ha subido un 77,2%. El maíz ha pasado a costar un 46,81% más y el trigo duro, un 222,40%. Según cuenta Mónica Ros, portavoz de la Asociación Catalana de Fabricantes de Piensos (ASFAC), también la alimentación del ganado se ha visto afectada aunque en menor medida porque hay parte de la producción que se hace con stock. "Ahora cuesta entre un 45 y un 55% más que hace dos años".

La mala aplicación de la ley

La subida de los cereales eleva el coste de producción. Sin embargo, el de venta sigue bajando porque la oferta es cada vez mayor. Y es que, según explica Solana, "no se está aplicando bien la ley que regula la norma de calidad para los productos ibéricos y se está vendiendo bajo ese nombre lo que no lo es". Ahora, con el boom de la demanda que hubo hace unos años, se produce ibérico en prácticamente toda España. Por eso, Extremadura ha pasado de producir el 80% de ibérico español hace sólo cuatro años, a tener ahora menos del 50%.

Con tanta producción el precio de venta ha bajado considerablemente. "No vendemos, regalamos", dice Solana. Y es que, producir un lechón cuesta 40 euros y al venderlo sólo se ganan seis. Esta cifra se eleva cuando hablamos de ganado cebado, "cada ejemplar supone pérdidas de 100 euros". En total, cada día, los ganaderos extremeños pierden en torno a medio millón de euros. De ahí la decisión de reducir la oferta de productos ibéricos a la mitad. "Se trata sobre todo de disminuir las pérdidas a la mitad", dice Solana.

Así, durante los próximos meses, sacrificarán lechones que no tendrán que cebar cuando crezcan y madres reproductoras para que disminuya la producción. "De esta forma, a parte, trataremos de ganar tiempo para conseguir que el Ministerio de Agricultura aplique correctamente la ley y se deje de comercializar pseudoibérico", dice.

El engorde de los precios

Mientras tanto, el producto sacrificado se almacenará para su posterior comercialización. Bajo el nombre ibericoextremadura, "venderemos toda esta materia sin intermediarios". El objetivo de la asociación es doble.

Por un lado, eliminar a los intermediarios que son los únicos que se están enriqueciendo con esta crisis. "Estamos regalando los productos pero ellos los siguen vendiendo a los mismos precios que antes", dice Francisco Javier. Otro ganadero cuenta que ellos venden los lechones a seis euros pero que ha visto que se pagan a 40 en el mercado.

Por otra lado, su otro objetivo es demostrar a los españoles qué es el verdadero ibérico. "De esta forma sabrán que hay cosas que están pagando como tal y que no lo son".