Ministra chilena advierte del "peligro sanitario" si se prohíbe el uso de la píldora del día después

Santiago de Chile.-  La ministra de Salud de Chile, María Soledad Barría, advirtió hoy de "un gran peligro sanitario", si el Tribunal Constitucional (TC) prohíbe efectivamente la entrega de la píldora del día después.

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(EFE)

La ministra de Salud de Chile, Soledad Barría, añadió que una prohibición de la píldora provocará una desigualdad "brutal" entre las mujeres del país en cuanto al acceso al fármaco, que la Iglesia Católica y sectores conservadores consideran "abortivo".

El TC anunciará el próximo 22 de abril un fallo, que es inapelable, sobre la constitucionalidad de la medida, aunque, según trascendió el miércoles, habría acogido una petición de sectores conservadores para prohibir el anticonceptivo de emergencia a adolescentes desde 14 años.

Barría añadió en declaraciones a Radio Cooperativa que una prohibición de la píldora provocará una desigualdad "brutal" entre las mujeres del país en cuanto al acceso al fármaco, que la Iglesia Católica y sectores conservadores consideran "abortivo".

La distribución gratuita de la píldora del día después a adolescentes y sin necesidad del consentimiento de los padres fue avalada en septiembre de 2006 por la presidenta Michelle Bachelet.

Tras una larga batalla en los tribunales de justicia y en medio de las protestas de los conservadores, la Corte Suprema autorizó la distribución del anticonceptivo de emergencia en el sector público a partir de enero de 2007.

Según la ministra Barría, el fallo del TC impedirá el acceso a la píldora a las adolescentes que no cuentan con recursos para adquirirla en farmacias, donde el fármaco se vende libremente, a un precio superior a los diez dólares.

"Si se confirma el fallo, es un error profundo desde el punto de vista científico, pero además un gran peligro desde el punto de vista sanitario", aseguró Barría.

Las autoridades de Salud consideran que el fallo también pone en riesgo una política de control de la natalidad que tiene más de 40 años de vigencia.

El director de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, Giorgio Solimano, dijo hoy que el fallo del TC es "devastador para casi cuatro millones de mujeres", porque el dictamen establecería que tampoco se podrán usar algunos anticonceptivos orales ni dispositivos intrauterinos.

Aseguró que, además, "redundaría en un enorme recargo sobre los servicios de salud, tanto por el mayor número de embarazos como por una posibilidad cierta de un mayor número de abortos".

El médico y diputado socialista Fulvio Rossi afirmó que el eventual fallo va "contra la libertad de las personas y el derecho de las mujeres a escoger qué es lo que hacen con su vida privada y sexual".

Anunció que diversas organizaciones sociales y el Colegio Médico están organizando un movimiento "para salir a defender los derechos que tienen hoy día las mujeres de escoger con libertad en materia de anticoncepción".

Karla Rubilar y LiLy Pérez, diputadas del derechista Partido Renovación Nacional, anunciaron que analizarán la posibilidad de recurrir ante organismos internacionales de ser efectivo el fallo.

Rubilar, que es médico y presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, señaló que la medida sería "un retroceso en las políticas de planificación familiar" que los deja a nivel de países "bastante subdesarrollados".

Su colega socialista Isabel Allende calificó al fallo como "dramático y "aberrante" e hizo un llamado a movilizaciones, en una nueva batalla por los derechos reproductivos.