Milán se hace 'navegable' para la Expo Internacional de 2015

MILÁN (ITALIA).-  Una nueva red de canales navegables, tres rascacielos, una torre, un centro de exposiciones y un museo del diseño, son sólo algunos de los proyectos que se impulsarán a partir de ahora en Milán, sede de la Expo de 2015, que tendrá como título "Alimentar el planeta, energía para la vida". Después de Zaragoza, la feria internacional pasará a la capital económica italiana, cuya candidatura se impuso ayer sobre la turca Izmir.

Maqueta para la Expo 2015 de Milán.

"Será un Expo ‘no logo’", dijo la alcaldesa de Milán Letizia Moratti en vísperas de la elección. Es decir, que en Milán no habrá un símbolo, como lo fue la Torre Eiffel para París en 1889. Milán, según explican los organizadores, prefiere para esta edición, pensar en los demás y crear una "red" para los países en vías de desarrollo, con un lema: "universidad, escuelas y hospitales para todos".

Sin embargo, el mensaje que llegó ayer fue distinto. La imagen de Milán cambiará y mucho. "Vuelve la ruta del agua" titularon los mayores diarios del país. Y es que en los 4.000 millones de euros otorgados por la Asamblea General de la Oficina Internacional de Exposiciones (Bie) para realizar el centro exposiciones, también habrá presupuesto para realizar un largo canal navegable que conectará el centro de la ciudad con la feria, cruzando numerosos parques. Una ruta del agua similar a la de ciudades como Ámsterdam o Berlín.

Los canales de Milán empezaron a construirse en 1179. Servían para el comercio y creaban una conexión entre los ríos y el centro de la ciudad. Hasta los años 20, fueron el símbolo de Milán y su notoriedad se debía especialmente a los espectaculares estudios hidráulicos de Leonardo Da Vinci. Durante el régimen fascista de Mussolini, la parte más céntrica de los canales fue literalmente "tapada" para poner los tranvías, lo que supuso una grande perdida para el encanto de la ciudad.

Milanoexpo

Esquema de los itinerarios por tierra y agua que conectarán el recinto de la Expo y la ciudad.

El siguiente paso es organizar el concurso para la asignación del proyecto del centro de exposiciones: 110 hectáreas de las que surgirán varios pabellones, un puente y una plaza. El reto es que sea una "low emission zone", (estas cosas los italianos prefieren decirlas en inglés), es decir, que la zona será de bajo impacto ambiental. No será accesible en coche y dentro sólo estarán permitidos vehículos eléctricos o de hidrógeno. Calefacción y aire acondicionado funcionarán utilizando el sistema fotovoltaico. "El ‘verde público’ es el imperativo para la Expo de 2015", explica Mauricio Cadeo, bronceado concejal del Ayuntamiento de Milán. "Plantaremos 500.000 árboles en cinco años", asegura.

Más allá de promesas y propaganda, todos saben que la Expo es un catalizador y un acelerador de proyectos urbanísticos. Ya existen los nombres para varios proyectos arquitectónicos en la ciudad, que verosímilmente se realizarán antes de 2015. En la zona de antigua feria, en la parte oeste de la ciudad, surgirán tres torres de Daniel Libeskind, Zaha Hadid y Arata Isozaki. Así mismo se impulsará la construcción del barrio residencial de Santa Giulia, proyectado por Norman Foster. Se realizarán nuevas líneas de metropolitana y se mejorarán los accesos a la ciudad a través de autopistas y tangenciales.

En fin, el día después de la confirmación de Milán para la Expo de 2015, pocos hablan de "Alimentación", el tema de la feria. Ahora todos esperan un cambio en la imagen de la ciudad, después de años de inmovilismo.