Diez años de paz en Irlanda: el conflicto contado en cinco películas

Hace diez años que comenzó a vislumbrarse el fin del largo y sangriento conflicto en Irlanda del Norte que, durante décadas, ha enfrentado a republicanos partidarios de la unificación de Irlanda y unionistas favorables al mantenimiento de la unión entre el Ulster y Gran Bretaña. El 10 de abril de 1998 todos los partidos norirlandeses excepto el DUP (el democrático unionistas radical) del reverendo Ian Paisley aprobaron la firma de los Acuerdos del Viernes Santo. Con ellos se sentaron las bases para una reconciliación y un entendimiento entre las partes que todavía no ha sido del todo alcanzado. Esta década ha estado marcada por ciertas controversias:

(Flickr)

Mural alusivo a la matanza del Domingo sangriento.

La suspensión de las instituciones autonómicas: Uno de los principales logros de los Acuerdos del Viernes Santo fue la creación de un Gobierno autónomo compartido entre católicos y protestantes. Sin embargo, la falta de acuerdo entre el Sinn Fein, brazo político del IRA, y el DUP hizo que entre 2002 y 2007 el Ejecutivo autónomo se encontrara suspendido. Sólo se reanudó su actividad cuando ambos partidos accedieron a gobernar conjuntamente.

El desarme del IRA, centro de toda la discrepancia: Gran parte de estas dificultades para llegar a un pacto de gobierno tienen su origen en los siete años que el IRA ha tardado en desarmarse. La lentitud con la que la banda terrorista destruía sus arsenales sumado al descubrimiento de una red de espionaje del IRA dentro del Sinn Féin, motivaron la salida del DUP del Gobierno de coalición.

La moderación, gran víctima política: Las dificultades sufridas durante los últimos diez años en proceso de paz han tenido como efecto una transformación del espectro político, polarizado cada vez más hacia las dos posturas más extremistas. Por el camino se han quedado las dos principales víctimas del radicalismo: los moderados partido Unionista del Ulster (UUP) y Laborista (SDLP), formaciones que antes de la firma del tratado de paz eran las más representativas de las comunidades protestante y católica. De los actores que promovieron hace una década los acuerdos hoy en día quedan pocos en activo: Tony Blair o el unionista moderado David Trimble ya se han retirado de la vida política. Sólo los emblemáticos Gerry Adams (líder del Sinn Fein), Bertie Ahern y Paisley sobreviven, aunque el pastor se retirará en unos meses.

Aprovechamos el décimo aniversario del inicio de la paz para repasar algunos de los títulos más destacados de toda una filmografía creada en torno al enfrentamiento. Cinco películas, en orden cronológico y centradas en cinco aspectos distintos de un conflicto que dura siglos:

'Michael Collins'

La historia biográfica del mítico líder irlandés fue dirigida por Neil Jordan y protagonizada por Liam Neeson. Aunque la cinta recibió críticas por los errores históricos que contenía, se hizo con el León de Oro de la 53 edición de la Mostra de Venecia. Michael Collins fue un revolucionario nacionalista que murió en 1922, durante la Guerra Civil irlandesa. Formó parte del Sinn Féin y del IRA y dirigió las actividades de combate contra la presencia militar británica.

'El viento que agita la cebada'

El cineasta británico Ken Loach, cuya carrera se encuentra fuertemente vinculada a obras con un contenido de hondo calado social, dirigió en 2006 esta película que se llevó la Palma de Oro en el Festival de Cannes. En la ya más que habitual colaboración con su guionista Paul Laverty, Loach desarrolla la historia de dos hermanos en vísperas de la guerra en una Irlanda convulsionada por las aspiraciones independentistas y la represión británica. Aunque en principio ambos lucharán por una misma causa, acabarán enfrentados por sus posiciones políticas.

'Domingo sangriento'

Uno de los capítulos que más convulsionaron la historia reciente de Irlanda del Norte llevan a la ciudad de Derry. Allí fue donde el 30 de enero de 1972 se reunieron alrededor de 15.000 manifestantes para protestar contra la represión contra la comunidad republicana y católica y las detenciones sin juicios. En cuestión de 20 minutos 13 personas murieron por los disparos del Ejército británico. Todos eran civiles desarmados. El filme, dirigido por Paul Greengrass, recrea esta matanza en clave de realismo documental, que también quedó inmortalizada por la canción de U2 'Sunday Bloody Sunday'. Ganó el Oso de Oro en la 52 edición de la Berlinale.

'En el nombre del padre'

La película por antonomasia sobre el conflicto en el Ulster consiguió siete nominaciones a los Oscar. Dirigida por Jim Sheridan y protagonizada por un soberbio Daniel Day-Lewis, la cinta narra la historia de Gerry Conlon, un joven irlandés culpado injustamente por las autoridades británicas de poner una bomba que mató a cinco personas en un pub londinense, acción que se atribuyó al IRA. El argumento está basado en los Cuatro de Guildford y los Siete de Maguire, acusados falsamente del atentado y del mantenimiento de una fábrica de suministro de explosivos para la banda terrorista. Una abogada se cruzará en el camino de Conlon, cambiando el curso de su historia.

'Omagh'

El primer varapalo al el recién nacido proceso de paz iniciado con los Acuerdos del Viernes Santo llegó el 15 de agosto de 1998. El IRA auténtico, una escisión de la banda terrorista opuesta al proceso de paz, hizo estallar un coche bomba en la ciudad de Omagh. La explosión dejó 29 muertos (entre ellos una mujer embarazada de gemelos) y cientos de heridos, haciéndose con el macabro récord del atentado más sangriento del conflicto norirlandés. El realizador Pete Travis centra su atención los efectos del terrorismo sobre la vida cotidiana, haciendo protagonistas de la historia a una familia rota por la pérdida de un hijo que trata de encontrar a los culpables de su muerte.

U2 y el conflicto norirlandés: el binomio entre música y paz

En la música también se han reflejado las heridas abiertas por la violencia en Irlanda. U2, grupo oriundo de Dublín, es una de las bandas que más preocupación ha mostrado por la situación interna en Irlanda del norte. Su compromiso con la causa y su apuesta por el fin de la violencia y la solución pacífica ha quedado plasmada en varias canciones. La más popular es 'Sunday bloody sunday', uno de los clásicos del grupo incluido en su álbum 'War' (1983).

La letra habla del sentimiento de impotencia ante la matanza del Domingo sangriento. Basada en un tema musical de The Edge y con una de las baterías de apertura (obra de Larry Mullen) más emotivas de la historia, el carismático Bono se pregunta: "¿Cuánto tiempo más tendremos que cantar esta canción?". Rolling Stone incluyó la interpretación en directo del tema incluida en su álbum en directo 'Under A Blood Red Sky' en la lista de las 50 actuaciones musicales que han cambiado el curso de la historia del rock.

Ya en solitario, Bono y el también irlandés Gavin Friday interpretaron a medias 'In the name of the father', la estremecedora canción con la que comienza la película homónima. En 1997, en su discutido y criticado disco 'Pop', la banda dedicaba otra canción al problema en Irlanda del Norte. 'Please' se trataba de un canto al diálogo político, un clamor dirigido a los dirigentes irlandeses para conseguir una salida negociada. Durante la gira de presentación del álbum 'Popmart' dentro de la espectacular escenografía que caracterizaba su puesta en escena, en las pantallas gigantes del escenario solían proyectarse imágenes del conflicto irlandés y de políticos como Gerry Adams o Tony Blair.