Notifican una "probable" muerte por fiebre amarilla en las cercanías de Asunción

Asunción.-  Las autoridades paraguayas informaron hoy de una "probable" muerte por fiebre amarilla selvática en una populosa urbe de los alrededores de Asunción, un día después de declarar la alerta epidemiológica para evitar la propagación de esa enfermedad.

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(EFE)

Desde que se anunció oficialmente hace una semana la aparición de la fiebre amarilla, se produjo una masiva concurrencia de personas a los centros médicos para inmunizarse, lo que motivó el desabastecimiento de las vacunas.

Hasta ahora los cinco casos de infección confirmados por el Ministerio de Salud se concentraban en dos distritos rurales del departamento de San Pedro (centro).

El viceministro de Salud, Antonio Barrios, se refirió a la muerte, el pasado 8 de febrero, de Raúl César Osorio, de 25 años, a raíz de una insuficiencia hepática.

Este caso, registrado en San Lorenzo, limítrofe con Asunción, "ha pasado al estado de probable causa de muerte por fiebre amarilla".

"Hay un informe de laboratorio que dice que tiene IGM positivo, esto sumado a los antecedentes clínicos más los laboratoriales, el caso pasa a ser probable (fiebre amarilla)", apuntó Barrios en una rueda de prensa junto a miembros de la comisión creada para acompañar la evolución de la enfermedad.

El viceministro explicó que el caso de Osorio quedará cerrado a fin de mes, cuando reciban los resultados de los análisis de unas muestras remitidas a laboratorios de Brasil, y precisó que de los trece vecinos del fallecido sometidos a observación cuatro continúan "con fiebre, sin síntoma importante como ictericia".

Asimismo, el viceministro manifestó que mañana la comisión estudiará otras muertes sospechosas de fiebre amarilla, como la de una persona hace tres semanas en Capiatá, a 30 kilómetros al sur de Asunción, y la de dos hombres en el distrito de Lima, en el departamento de San Pedro.

Uno de ellos, un joven de 25 años, murió el 1 de febrero en el Hospital de Clínicas de Asunción de fiebre amarilla, según el director del centro hospitalario, Adolfo Galeano, aunque para el director de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud, Gualberto Piñánez, sigue siendo un caso "altamente sospechoso".

Desde que se anunció oficialmente hace una semana la aparición de la fiebre amarilla, enfermedad que no se registraba en el país desde hace 34 años, se produjo una masiva concurrencia de personas a los centros médicos para inmunizarse, lo que motivó el desabastecimiento de las vacunas en los hospitales públicos.

El presidente paraguayo, Nicanor Duarte, anunció hoy que Perú enviará en los próximos días 200.000 dosis de vacuna, otras 100.000 provendrán de Brasil, que se sumarán a una partida de 600.000 prometidas por la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

"Estamos enfrentando esta situación que es un problema regional. Brasil tiene un problema mucho más complicado y aún así nos están enviando 100.000 dosis y las primeras 50.000 están llegando este fin de semana", aseveró Duarte.

Agregó que la alerta declarada ayer por el Ministerio de Salud tiene como objetivo intensificar las medidas preventivas en la lucha contra el mosquito transmisor.

Hasta ahora han sido vacunadas más de 22.000 personas en la zona de San Pedro, número que debe llegar a 50.000 en los próximos días, mientras que en Asunción se inmuniza a las personas que demuestren que van viajar a los países donde la enfermedad es endémica, como Brasil.

La aparición de la fiebre amarilla en Paraguay coincidió con el comienzo de una fuerte campaña de prevención contra el dengue, cuyo brote epidémico causó el año pasado 17 muertos de 27.000 infectados.