Anatomía de los dibujos animados

Charlie Brown, Pikachu, Betty Boop, Hello Kitty... ¿Cómo serían si les hiciéramos una radiografía? El original artista Michael Paulus ha dado el paso y nos muestra el lado más íntimo de los personajes de nuestra infancia.

Michael Paulus

La placa radiográfica de Pikachu

Michael Paulus se ha dedicado a «diseccionar» dibujos animados antiguos y actuales para que veamos con más claridad cómo es el interior. Cada estilo de dibujo tiene sus peculiaridades antropomórficas. Fantasía e imaginación científica, todo en uno.

A character study of 22 present and past cartoon characters

Ahí nos explica que, como todo niño que se precie, creció viendo los dibujos animados dando por supuestas las distorsiones y los extraños cuerpos que tenían sus personajes:

Estos iconos solían estar distorsionados grotescamente desde el punto de vista humano del que derivaban. Como eran tan tópicos y estaba tan asumida su existencia, pensé en diseccionarlos de la misma forma que hace la ciencia con todos los objetos vivientes. Intentando comprender sus orígenes y fisiología verdadera. Posiblemente, para comprenderlos mejor y verlos desde una perspectiva distinta, desde lo que son en sus conceptos más básicos.

Decidí seleccionar algunos de los personajes más populares y presentar sus sistemas esqueléticos como me imagino que se parecerían si de verdad tuvieran cuencas de los ojos de la mitad del tamaño de la cabeza, manos sin dedos o pies que abarcaran el 60% de la masa corporal.

Ahí, por ejemplo, podemos ver el interior de Pikachu y asombrarnos de que la columna vertebral del ratón eléctrico pueda soportar semejante cráneo. ¿Sufrirá de artrosis vertebral prematura por la excesiva carga llegado a una determinada edad?

O Betty Boop... ¿Cómo será capaz de vocalizar sin tener el maxilar inferior? ¿Se lo extirparon o fue un defecto congénito? ¿Dónde se situará entonces la lengua? Eso explica uno de los grandes enigmas de la humanidad: Betty Boop no hablaba como si tuviera un calcetín en la boca porque fuera un poco pava, es que la pobre no estaba preparada anatómicamente para esos menesteres oratorios.

En fin, mejor no sigo que estoy "patologizando" a los pobres dibujos, qué culpa tendrán de mi deformación profesional. Mejor que los veas tú mismo en la colección de dibujos.