La producción del 85% de la carne ecológica gallega procede de una cooperativa de Verín

Verín (Ourense).-  El 85 por ciento de la carne ecológica que se produce en Galicia procede de 60 ganaderos de Lugo, Ourense, Asturias, Extremadura y el Alentejo portugués, socios o colaboradores de una cooperativa de Verín que vende carne "sin química" de todas las razas autóctonas gallegas, según dijo a Efe su gerente José Luis Vaz Fernández.

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(EFE)

El 85 por ciento de la carne ecológica que se produce en Galicia procede de 60 ganaderos de Lugo, Ourense, Asturias, Extremadura y el Alentejo portugués, socios o colaboradores de una cooperativa de Verín.

La cooperativa Biocoop nació en 1998 por la escisión de otra anterior formada por once ganaderos que, según Vaz, apostaron desde 1990 por transformar las explotaciones vacunas convencionales en "unidades productivas ecológicas", en las que los animales no reciben medicamentos y sólo ingieren pastos y forrajes obtenidos con agua y terreno sin pesticidas ni otros elementos químicos.

Vaz considera un éxito la apuesta de entonces y que ahora mantienen 30 ganaderos que son socios de Biocoop y otros 30 colaboradores, ya que comprobaron que las cinco razas autóctonas gallegas están perfectamente adaptadas a su medio por lo que no precisan tratamientos.

Aun así, considera que los consumidores gallegos no están mentalizados de las ventajas de los productos ecológicos "porque todos tenemos una aldea o un carnicero de confianza que nos suministra carne, pero es un error pensar que es ecológica", matizó.

Los ganaderos de Biocoop alimentan a sus reses con leche materna durante los ocho primeros meses y luego hasta los doce meses con pastos y forrajes de producción ecológica obtenidos en terrenos que pasan controles periódicos para descartar la existencia de pesticidas.

La carne obtenida, según Vaz, tiene un sabor intenso y una textura diferente al resto incluso en el caso de las reses identificadas como "ternera gallega", que suponen el 60 por ciento de la producción, mientras que el 40 por ciento restante es de las razas en peligro de extinción "cachena", "vianesa", "freiresa", "caldelá" y "limiá", perfectamente adaptadas a la crianza en libertad.

"A pesar de estas características muy apreciadas en las personas que las conocen, más de la mitad de los 500 becerros que comercializamos se venden fuera de Galicia, sobre todo en Valencia y Madrid, y ahora estamos abriendo un circuito en Alemania donde la demanda de este producto es mayor que la oferta", dijo.

Además de la carne ecológica, Vaz y los ganaderos de Biocoop venden la idea del "consumo responsable", de forma que en todos los pedidos que les llegan incluyen piezas de diferentes partes de la res, por lo que un cliente puede llevarse la mitad del animal o un paquete compensado con carne de los once cortes posibles "para aprovechar al máximo el ejemplar", agregó.

Los proyectos de futuro de la cooperativa incluyen, además de la comercialización en Alemania, la ampliación con socios de Laza y Pobra de Trives y la apertura de carnicerías "de fresco" en toda Galicia, porque, según dijo, los consumidores que la prueban en las carnicerías que ya la sirven no quieren otra porque se distingue por el sabor y el aspecto.