Saldaña anuncia un plan de reestructuración del sector ovino para evitar brotes

Sevilla.-  El consejero de Agricultura, Isaías Pérez saldaña, anunció hoy un plan de reestructuración del sector ovino andaluz, que cuenta con 3,2 millones de cabezas y casi seis mil explotaciones, para evitar brotes de lengua azul como el que este año ha matado a 128.000 ovejas en la región.

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(EFE)

El consejero de Agricultura, Isaías Pérez saldaña, anunció hoy un plan de reestructuración del sector ovino andaluz, que cuenta con 3,2 millones de cabezas y casi seis mil explotaciones, para evitar brotes de lengua azul como el que este año ha matado a 128.000 ovejas en la región.

Pérez Saldaña presentó en conferencia de prensa un estudio efectuado por la Universidad de Córdoba en 125 explotaciones ganaderas de toda Andalucía, menos Almería y Granada, que revela que la mayoría de las explotaciones que han sufrido la enfermedad disponen de menos de 200 hectáreas y de poco más de trescientas cabezas.

Las explotaciones que han padecido la enfermedad suelen ser las más pequeñas, las menos tecnificadas y menos profesionalizadas, en las que la ganadería es una actividad secundaria y no la principal actividad económica.

Esto revela, según explicó el catedrático de Veterinaria de Córdoba Anselmo Perea, que al estar los animales muy concentrados, la capacidad de diseminación de la enfermedad es muy elevada, lo que se agrava ante la ausencia de infraestructuras, equipamientos, mosquiteros, naves y "una discreta presencia de planes sanitarios".

Perez destacó que, por provincias, se han dado dos modelos de incidencia de la enfermedad, cuya mortalidad ha sido del 20 por ciento en las provincias de Sevilla, Málaga, Córdoba y Huelva, mientras que se ha disparado al 34 por ciento en las de Jaén y Cádiz.

La enfermedad ha afectado a explotaciones que destinan sus reses al mercado de carne, ya que las lácteas no han tenido problemas, según recordó Pérez Saldaña, quien aseguró que este plan de reestructuración del sector se acometerá cuando culmine el plan de recuperación, ahora en marcha con varias líneas de ayuda.

El consejero justificó estas ayudas en el costo de la alimentación de las reses, en la elevada mortalidad sufrida en algunas zonas y en el precio de la carne en origen, y recordó que las ayudas consisten en 100 euros por res muerta o sacrificada por enfermedad, un precio que es más del doble de su valor de mercado.

Si a estas ayudas se suman los 18 euros por feto -los abortos con la enfermedad se disparan al 12 por ciento, cuando lo normal sin enfermedad es el 1 por ciento-, el total se eleva a unos 13 millones de euros.

A estas cantidades hay que sumar seis euros por res viva en las zonas afectadas por la enfermedad, lo que equivale a otros 12 millones de euros.

También se cuenta con una línea de préstamos hasta un máximo de 18.000 euros por explotación, y hasta un máximo de 100.000 euros por cooperativa, y ayudas directas a la reposición o compra de nuevas reses.

Pérez Saldaña abogó igualmente, para cuando llegue la hora del plan de reestructuración, por identificar la carne del cordero lechal andaluz, ganar en calidad y abrir nuevos mercados a esta carne, para garantizar su futuro.