Toro (Zamora).- La palentina Marta Domínguez, que participaba por vez primera en unos campeonatos de Europa de cross, dio a España la primera medalla de oro en la historia del torneo, que por séptima vez proclamó campeón al ucraniano Sergey Lebid y a España ganadora por equipos en hombres y mujeres.
La arrolladora recta final de Marta Domínguez fue el momento cumbre de los campeonatos, que hasta entonces habían negado la medalla a España en las categorías menores. De una tacada cayeron tres: oro para Marta, bronce para la barcelonesa Rosa Morató y oro por equipos.
Once medallas internacionales, incluidas dos de oro europeas y dos de plata mundiales en 5.000 metros, jalonaban hasta hoy la carrera deportiva de Marta Domínguez. La duodécima ha llegado en un año complicado para la palentina, que no pudo estar, por lesión, en los Mundiales en pista de Osaka.
En los Europeos de cross, España había ganado en categoría absoluta once medallas por equipos (incluidas tres de oro) y diez individuales, pero jamás había logrado un título individual en trece ediciones de los campeonatos.
Marta Domínguez se puso a resguardo del viento, aprovechando primero la corpulencia de la rusa Mariya Konovalova y después el ataque de la húngara Aniko Kalovics, tercera en 2004. A 3.000 metros del final el grupo delantero se redujo a seis atletas, entre ellas Marta y Rosa Morató.
La barcelonesa se puso al frente a falta de un kilómetro y logró que Kalovics se descolgara. España se aseguraba dos medallas y Marta puso la guinda con un ataque súbito a 500 metros de la llegada que levantó rugidos de admiración entre el público.
En una mañana soleada y ventosa, el circuito del Monte La Reina, en la margen derecha del Duero, lucía un aspecto espléndido con la hierba en el punto idóneo de dureza, ideal para atletas habituados a la pista como Marta Domínguez.
En la prueba masculina Sergey Lebid se proclamó por séptima vez campeón de Europa y España recuperó el título que en los cuatro últimos años había pertenecido a Francia. Chema Martínez, quinto, y Jesús España, sexto, encabezaron la selección española.
Mientras Alberto García y Chema Martínez se dejaban ver siempre al frente del grupo, Jesús España marchaba arropado en el centro.
A dos vueltas del final, al paso por los 7.700 metros (la carrera tenía 10.700), Lebid hizo su poderosa apuesta con un tirón brusco al que solo respondieron el sueco Mustafá Mohamed (de madre somalí) y Chema Martínez. A continuación el madrileño tiró con fuerza para abrir hueco con respecto a los perseguidores.
Cuatro segundos separaban al trío delantero de los de atrás. Jesús España aún soñaba con llegar al esprint, pero a 1.300 del final Mohamed atacó a fondo y se llevó consigo a Lebid. Chema se quedó en tierra de nadie expuesto al ataque del portugués Rui Silva, que rápidamente dio cuenta del madrileño y terminó en el podio.
La medalla de oro se decidió en los últimos 500 metros. En ese punto Lebid metió la sexta marcha y dejó clavado a Mohamed.
La rumana Ancuta Bobocel, campeona júnior en 2005, consiguió dos años después el título sub 23 dominando de principio a fin una carrera en la que la salmantina Marta Romo obtuvo el séptimo puesto.
Romo, que logró un bronce como júnior en 2004, permaneció en el segundo grupo hasta que el ritmo se avivó, media la prueba, y al final reaccionó para meterse entre las ocho mejores.
Bobocel hizo carrera aparte casi desde la salida. En posesión de tres medallas (una de cada meta) en categoría júnior, se fue por delante sin oposición. La holandesa Adrienne Herzog consiguió la medalla de plata y la polaca Katarzyna Kowalska la de bronce. Gran Bretaña ganó por equipos, seguida de Rusia y Polonia, y España, quinta, mejoró dos puestos con respecto al último Europeo.
La carrera masculina sub 23 consagró al turco Kemal Koyuncu, que rompió a 1.500 de la meta, sorprendiendo al ruso Yevgeny Rybakov y al italiano Andrea Lalli, que la habían controlado hasta entonces.
Koyuncu batió por dos segundos a Rybakov y el británico Andy Vernon completó el podio. El español Vïctor García, que estuvo en el grupo delantero tres cuartos de la prueba, pinchó al final y fue vigésimo sexto. El mejor español fue Francisco Díaz, vigésimo, y por equipos España, novena, bajó dos puestos con relación al 2006.
Mohamed Elbendir dejó escapar su última oportunidad de conseguir una medalla como júnior. El vallisoletano, en su último año en la categoría, marchaba en el cuarteto de cabeza a dos kilómetros del final pero cedió poco antes de entrar en la última vuelta y retrocedió cuatro puestos, hasta el séptimo.
Francia hizo doblete con Mourad Amdouni, actual campeón de Europa júnior de 5.000 metros, y Florian Carvalho. El ucraniano Dmytro Lashin, al que Elbendir arrebató la medalla de plata en los Europeos en pista, consiguió aquí el bronce. Francia ganó por equipos, seguida de Gran Bretaña y Alemania, mientras que España, subcampeona el año pasado en Italia, cayó al quinto puesto.
Abanderando una exhibición británica (cuatro atletas entre las seis primeras), Stephanie Twell revalidó su título europeo júnior en la primera carrera de la mañana.
Twell cubrió los 4.200 metros en 14:12, nueve segundos menos que la polaca Danuta Urbanik, y Charlotte Purdue, tercera a diez segundos, completó el podio. España, cuarta el año pasado en Italia, retrocedió en casa hasta el octavo puesto por equipos con Beatriz Esteban, decimoquinta, al frente.
Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.
Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...
Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.
A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Citar este verso de Machado no puede ser más ocurrente al hablar de Mariano Rajoy. Tras la renuncia de Zapatero y las voces que señalan que la estrategia popular podría verse dañada, es necesario preguntarse algo. ¿Ha hecho camino Rajoy? ¿Se ha preparado para ser presidente? Quizás la respuesta sorprenda.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Algunos luchamos por tener los pies en suelo.” Lo decía ayer en su Twitter Raül Romeva, uno de los cuatro eurodiputados españoles (Oriol Junqueras, de ERC, Ramon Tremosa, de CiU, Rosa Estarás del PP y él, de ICV) que apoyaron la enmienda para evitar que el presupuesto comunitario de 2012 contemple los vuelos en primera clase de los parlamentarios europeos. No era una excepción. Lo escribía ahí porque es lo que hace siempre: ser transparente.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Son los cien primeros, como podrían ser doscientos o diez. Lo importante es el concepto. La idea de tener unos días para llevar a cabo la transición desde la oposición al gobierno. Del banquillo, a llevar el dorsal titular. Nunca tendremos una segunda oportunidad de crear una buena primera impresión. Y los cien primeros días son esa primera impresión. Veamos su importancia.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Os propongo que sea el Comité Federal, en la próxima reunión que tengamos, después de las elecciones autonómicas y municipales, el que fije el momento de activar el proceso de primarias previsto en los Estatutos del partido para elegir nuestra candidatura a las próximas elecciones generales.” De esta manera, Zapatero ha puesto las primarias en el punto de mira tras anunciar que no será candidato a la reelección. Tras este anuncio, observamos algunas reflexiones sobre el proceso
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si quieres, puedes registrarte o, si ya lo estás, iniciar sesión ahora.