La derecha cristiana de Iowa tiene fe en Mike Huckabee

Washington.-  El aspirante a la candidatura presidencial republicana Mike Huckabee asegura, en un anuncio lanzado esta semana, que su fe cristiana lo define como persona, una afirmación que promete tener recompensa en las urnas.

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(EFE)

Los cristianos evangélicos de Iowa, dicen ver en el candidato presidencial Republicano y gobernador de Arkansas, Mike Huckabee, al candidato ideal para relevar a George W. Bush en la Casa Blanca.

"La fe no solo ejerce influencia sobre mí, realmente me define", arranca el anuncio del ex gobernador de Arkansas, quien asegura no tener que levantarse cada mañana pensando en lo que cree.

Mensajes como ese parecen sonar a gloria celestial a los cristianos evangélicos de Iowa, que dicen ver en Huckabee al candidato ideal para relevar a George W. Bush en la Casa Blanca.

Casi siete de diez de sus partidarios en Iowa, el estado en el que el próximo 3 de enero arranca el largo proceso electoral de EE.UU., son protestantes evangélicos y casi tres cuartas partes van a misa al menos una vez a la semana, según las últimas encuestas.

Su popularidad con ese grupo de votantes le ha permitido trepar al segundo puesto en las encuestas de intención de voto, en las que pisa los talones al ex gobernador de Massachusetts, Mitt Romney.

Ese fulminante ascenso es "uno de los giros más inesperados" en la dinámica campaña de los republicanos e introduce un nuevo elemento de incertidumbre en la ya impredecible batalla de los aspirantes conservadores por la presidencia, aseguraba el miércoles pasado el diario The Washington Post.

Thomas Schwartz, profesor de historia de la Universidad Vanderbilt, confiesa que la situación lo tiene completamente "desconcertado".

El experto recuerda que durante las últimas tres décadas el Partido Republicano se ha caracterizado por inclinarse por un candidato y brindarle apoyo incondicional, algo bien distinto de lo que ocurre en esta ocasión.

"Ninguno tiene la bendición de la actual administración", dijo a Efe Schwartz, quien reconoce que "aunque puede que ese respaldo no sea de gran ayuda en estos momentos, (...) todavía hay una base que respalda a la administración y se trata de una base muy importante en las elecciones primarias" que empiezan a principios de año.

Schwartz no cree que Huckabee vaya a llegar mucho más lejos de Iowa, pero aun así insiste en que su potencial victoria allí podría dañar las posibilidades de Romney en Nuevo Hampshire, el estado que seguirá a Iowa en el proceso electoral.

Dante Scala, de la Universidad de Nuevo Hampshire, comparte esa impresión.

"Si Huckabee gana en Iowa será el final de la campaña de Romney y de la de Fred Thompson", dijo a Efe Scala.

Pese a que Romney ha invertido sustanciales recursos en Nueva Hampshire y lidera las encuestas en el estado, un mal resultado en Iowa haría, según Scala, que los votantes dejaran de verlo como "elegible", lo que abriría la puerta a aspirantes como el ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani.

Para Ronald Stockton, de la Universidad de Michigan, lo curioso es que políticos moderados como Giuliani o Romney tengan tanta respaldo, algo "muy interesante" si se tiene en cuenta que la corriente más conservadora es muy poderosa dentro del partido.

Stockton cree que lo que intenta Huckabee es hacerse con el voto de los conservadores cristianos, una estrategia que, según él, podría permitirle hacerse con la candidatura a vicepresidente si Romney o Giuliani, los actuales favoritos, ganan la nominación.

Titulares recientes como el de "Huckabee se concentra en la fe" o "Huckabee: el sueño de los cristianos conservadores" sugieren que el político ha hecho su apuesta.

El anuncio divulgado el lunes no deja lugar a dudas: "No sacrifiquemos nuestros principios por la política, ni ahora ni nunca", dice Huckabee, quien deja clara su postura anti-abortista al señalar que "la vida comienza con la concepción".