Familiares de Betancourt piden a Uribe que recapacite en una manifestación en París

París.-  Allegados de Ingrid Betancourt instaron hoy al presidente de Colombia, Álvaro Uribe, a recapacitar y dejar que su colega venezolano, Hugo Chávez, siga mediando por un acuerdo humanitario para la liberación de rehenes de la guerrilla (FARC), durante un acto en París.

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Pero también instaron a las FARC a entregar cuanto antes, y en cualquier caso antes de fin de año, como se han comprometido, pruebas de vida de Betancourt y de otros rehenes, con un "mensaje fuerte", para reactivar el proceso negociador.

Unas pocas decenas de personas se congregaron ante la embajada de Colombia en París, convocadas por el Comité de Apoyo a Ingrid Betancourt, la ex candidata presidencial colombiana que también tiene nacionalidad francesa y que está en manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) desde 2002.

El comité había llamado a ese acto, después de que Uribe pusiera fin el pasado miércoles a la mediación de Chávez por un acuerdo humanitario para el canje entre unos 45 rehenes de las FARC, entre ellos Betancourt y tres estadounidenses, y 500 insurgentes presos.

Uribe justificó su decisión, anunciada al día siguiente de que Chávez se reuniera con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en París, en que el mandatario venezolano habló con un jefe militar colombiano, en contra de lo convenido.

Es "absolutamente escandaloso que de la noche a la mañana" Uribe decidiera de forma "unilateral" cerrar la puerta a la mediación de Chávez, "el único al que las FARC reconocen y el único que puede hablar a la vez" con él y con la guerrilla, afirmó el ex marido de Betancourt, el francés Fabrice Delloye.

Delloye estaba acompañado por su hijo Lorenzo, fruto de su unión con Betancourt (su hija, Mélanie, no estaba presente al estar de viaje), y con el actual marido de la rehén, Juan Carlos Lecompte, quien el próximo lunes emprende viaje de regreso a América.

Uribe tomó esa decisión sin contactar con Chávez ni tampoco con Sarkozy, denunció Delloye, quien acusó al líder colombiano de estar interesado "únicamente en consideraciones de política interior".

Como aspira a un tercer mandato, dijo, Uribe "cada vez quiere interrumpir las posibilidades de un acuerdo humanitario. Lo ha hecho cada vez" que ha habido progresos.

Si bien Delloye dijo entender que Uribe no quiera negociar con las FARC y consideró "odiosa" la forma de la guerrilla de hacer la guerra, recalcó que en todos los conflictos en el mundo, como el israelí-palestino, ha habido canjes de presos o rehenes.

Hay que hacer entender a Uribe, dijo-, que es "absolutamente indispensable" que recapacite y permita a Chávez restablecer la comunicación con las FARC para avanzar hacia el acuerdo humanitario.

"En juego está no sólo la vida de rehenes, algunos de ellos secuestrados desde hace más de 10 años, sino también la paz y prosperidad de Colombia", argumentó.

Juan Carlos Lecompte también instó a Uribe a dar marcha atrás y señaló que las vidas humanas están "por encima de cualquier consideración política u otra".

El marido de Betancourt teme que el proceso que se había puesto en marcha vuelva a estancarse con el "rompimiento tan brusco" de la mediación de Chávez por el presidente colombiano.

Lecompte calificó de "muy buena noticia" la afirmación de Chávez de que va a intentará obtener de la guerrilla pruebas de vida de los rehenes y pidió al mandatario venezolano que "vaya más allá" y "siga con el trabajo que venía haciendo" y cuyo primer paso -llevar a guerrilleros a Caracas para hablar- fue un "paso gigantesco".

Al mismo tiempo, el marido de la rehén se mostró convencido de que las pruebas de vida "existen", "están en camino y van a llegar muy pronto (...), ojalá en los próximos 15 días".

En todo caso está "seguro" de que llegarán antes de fin de año -según la promesa escrita del jefe de las FARC, Manuel Marulanda, a Chávez-, y darán un nuevo aire" al proceso del acuerdo humanitario.

El presidente venezolano, que había esperado llevar a Sarkozy y a los familiares de Betancourt pruebas de vida en su viaje a París, no las obtuvo, pero dijo que había recibido una carta de Marulanda con la promesa de entregar esas pruebas "antes de fin de año".