Ferrer y Nadal copan los dos puestos de semifinalistas del Grupo Dorado

SHANGHAI.-  Los tenistas españoles David Ferrer y Rafael Nadal cerraron sus respectivos pases a las semifinales de la Copa Masters de Shanghai (China), tras brillantes victorias ante el francés Richard Gasquet y el serbio Novak Djokovic, con las que ocupan el primer y segundo puesto, respectivamente, del grupo Dorado de la competición, para sumar el tercer doblete nacional de la historia en la penúltima ronda del torneo de 'maestros'.

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ap (EUROPA PRESS)

Los tenistas españoles David Ferrer y Rafael Nadal cerraron sus respectivos pases a las semifinales de la Copa Masters de Shanghai (China), tras brillantes victorias ante el francés Richard Gasquet y el serbio Novak Djokovic, con las que ocupan el primer y segundo puesto, respectivamente, del grupo Dorado de la competición, para sumar el tercer doblete nacional de la historia en la penúltima ronda del torneo de 'maestros'.

Ferrer necesitó sólo una hora para derrotar a Gasquet por un doble 6-1, asegurándose el primer puesto del grupo Dorado y confirmando, al mismo tiempo, la presencia en semifinales de Nadal, que estaba a la espera del resultado tras su victoria sobre Djokovic (doble 6-4) ante la posibilidad de quedarse fuera como consecuencia de un posible triple empate que se hubiera decidido por el balance de puntos ganados y perdidos, tras una hipotética derrota del alicantino en tres mangas.

Los dos jugadores españoles presentes en este torneo de Shanghai se sumaron así como semifinalistas al estadounidense Andy Roddick, que ayer confirmó su presencia en la penúltima ronda tras asegurarse una de las dos plazas del grupo Rojo, en el que se resolverá mañana quiénes son el líder y el otro clasificado.

El doblete español supone, además, la tercera ocasión en la que dos representantes nacionales se clasifican entre las cuatro primeras raquetas de la 'Masters Cup', tras los logrados por Alex Corretja y Carlos Moyà en 1998, que acabó con el triunfo del primero en la única final española disputada hasta el momento, y por Juan Carlos Ferrero y de nuevo el propio Moyà en 2002.

El de Jávea dio continuidad hoy al excelente papel que está cumpliendo en su estreno en el torneo de 'maestros', confirmándose como auténtica revelación tras sumar un pleno de triunfos en su tercer y último compromiso en esta fase de grupos ante Gasquet, otra de las revelaciones del torneo tras complicar el primer partido a Nadal y acabar con las posibilidades de Djokovic en la segunda jornada.

David Ferrer, que ha llegado a Shanghai como sexto jugador del mundo tras los triunfos en Auckland, Bastad y Tokio en 2007, demostró una insultante superioridad desde el primer momento, pues el set inicial disputado frente al galo lo resolvió en sólo 26 minutos, tras encadenar un parcial de 7-0 que tuvo su continuidad en la segunda manga, con la que cerró el partido en una hora escasa (Desde el 1-1 al 2-0 del segundo set).

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La exhibición de tenis protagonizada por Ferrer a través de una seguridad aplastante y una exquisita variedad de golpes fue el epílogo de la iniciada en el turno previo por Rafa Nadal ante Novak Djokovic, al que se impuso por un definitorio doble 6-2, pero engañoso en cuanto a los momentos de gran tenis con los que se pudo disfrutar por parte de ambos jugadores.

Nadal necesitaba imponerse al serbio, que ha protagonizado una muy discreta actuación en el torneo asiático, del que se despide con tres derrotas en otros tantos partidos en el año de su estreno en la Copa de 'maestros', y cumplió su cometido, sabiendo, además, que multiplicaba sus opciones de clasificación al conseguir ganar en dos sets.

El triple campeón de Roland Garros salió a la pista muy motivado, presionando al resto el saque de su rival desde el primer juego del partido, en el que dispuso ya de dos bolas de 'break', que consumaría un poco más tarde, en el segundo servicio del número 3 del mundo, para resolver con un 6-4 a favor tanto la primera, como la segunda manga, que siguió un guión similar.

La despedida del serbio, que ha llegado muy cansado a este final de temporada, en el que no ha podido demostrar la categoría de su tenis, no empaña, sin embargo, el brillante año de su confirmación entre la élite de la ATP, como demostraron los momentos de gran tenis desplegados en el clásico en el que se han convertido sus duelos con Nadal, en la séptima ocasión en la que se enfrentaban este año.