Tíbet permanece hoy en el caos tras los disturbios registrados en los últimos días, los peores en los últimos 20 años, y que ya se han cobrado la vida de al menos diez personas. Pekín indicó además que un número indeterminado de personas resultaron heridas en la revuelta, entre ellas varios policías que están en estado grave, y que un total de 580 personas fueron evacuadas de la ciudad por las fuerzas de orden público. Las manifestaciones comenzaron el pasado lunes en el monasterio de Deprung, cuando 500 monjes quisieron conmemorar de un modo pacífico el 49 aniversario de la rebelión de 1959 contra el dominio de China. A lo largo de la semana, las protestas fueron adquiriendo intensidad y se prolongaron hasta ayer, jornada en la que alcanzaron su máxima magnitud al sumarse civiles a las manifestaciones de los monjes y protagonizar enfrentamientos con la Policía e importantes disturbios. 1'07''