Valencia celebra el retorno del Kaiser

Michael Schumacher ha anunciado en su página web su intención de volver a los circuitos de F1 para sustituir al accidentado Felipe Massa. Valencia tendrá en el alemán el mejor reclamo para reactivar una venta de entradas que por ahora parece no marchar como se esperaba.

Schumacher volverá a disputar una carrera de F1 para sustituir a su excompañero de equipo y amigo en la actualidad, Felipe Massa.

El mejor piloto de F1 de todos los tiempos, el alemán Michael Schumacher, el Kaiser, ha anunciado su vuelta a los circuitos, sustituyendo al que en otros tiempos fuera su compañero, el brasileño Felipe Massa. Y lo hará por gratitud a Ferrari según él mismo ha explicado, ya que su intención no es otra que la de ayudar al equipo que tantos éxitos le llevara a conseguir, en unos momentos muy difíciles como los que ahora atraviesa la escudería de Maranello. De este modo, el circuito urbano de Valencia tendrá el honor de ser el primer escenario donde se pueda asistir al retorno de Schumacher tras su retirada en el 2006. Un retorno que para muchos ferraristas significará un sueño hecho realidad.

Hay que reconocer que el gesto del alemán es de los que hacen más grande a un campeón. Sin mucho que ganar pero sí con mucho que perder (no olvidemos que el F60 se ha demostrado como un monoplaza mediocre), Schumacher a sus cuarenta años no ha podido (probablemente ni querido) decir que no a la petición de auxilio de Ferrari. Con el fin de llegar en la mejor forma posible en su reencuentro con la alta competición, el alemán se someterá a un entrenamiento específico durante las próximas tres semanas que restan para la cita de Valencia.

Desde que el pasado fin de semana Massa en Hungría, sufriera el espectacular accidente que le va a dejar fuera de las pistas durante un tiempo que aún está por determinar, se habían hecho multitud de conjeturas sobre cuál sería el piloto que le sustituyera hasta que el brasileño estuviera en disposición de subirse de nuevo a su F60.

Los nombres de los actuales probadores de Ferrari, el español Marc Gené y el italiano Luca Badoer parecían los primeros colocados en la lista de candidatos, aunque también se barajaron otras posibilidades como las de los ex pilotos de F1, el británico Anthony Davidson que corriera en Super Aguri el año pasado o el recientemente despedido de Toro Rosso, el francés Sebastian Bourdais.

Se había especulado incluso con la posibilidad rocambolesca, y por encima de todo mediática, de que fuera el bicampeón mundial Fernando Alonso el que supliera a Massa en Valencia, dado que a día de hoy la escudería Renault para la que corre el asturiano, no participará en el GP de Valencia como consecuencia de la sanción impuesta por la FIA al equipo galo después de la última carrera en Hungría.

Precisamente esta sanción a Renault, que conllevaría por tanto la ausencia de Alonso en el circuito de Valencia, había disparado todas las alarmas entre los organizadores de la carrera, que veían cómo se podía dar el golpe de gracia definitivo a una venta de entradas hasta la fecha muy por debajo de lo esperado. En un país donde la F1 para la mayoría de los espectadores gira entorno a la figura de un único piloto, si éste desaparece, con él lo hace también el interés por el espectáculo que ofrece la F1 para esa amplia mayoría.

Por ello, la posibilidad de que Alonso pudiera subirse a los mandos de un Ferrari por una sola carrera, se presentaba como algo histórico y que aseguraría colgar el cartel de no hay entradas. Ahora, descartada esta posibilidad pero con la vuelta del heptacampeón del mundo, el aliciente es mayor si cabe. Porque pocos son los dudan que con la vuelta del Kaiser el siguiente golpe de efecto lo proporcionará la Corte de Apelación de la FIA anunciando la anulación de la sanción a Renault. Alonso y Schumacher de nuevo compitiendo codo con codo representa mucho dinero como para dejar escapar la ocasión. El lleno está más que asegurado. El 23 de Agosto Valencia vivirá sus particulares fallas de verano sobre el asfalto.