Vinhos verdes, traicioneros

Una de las mejores escapadas cercanas que puede hacerse desde España en estas fechas, y tal como esta el panorama, es el Noroeste de Portugal: Una region donde tienen su origen los Vinos Verdes. Volverás enamorado del paisaje. Lo de los vinos dependerá más de la suerte, aunque hay alguno que merece la pena.

Casa do Valle

El noroeste de Portugal es una de las zonas más espectaculares de la Península Ibérica. Agreste todavía en algunas de sus áreas boscosas, escarpada en sus sierras y fértil en cada uno de los valles de sus innumerables ríos. Es una región de gran belleza cuyos vinos –no todo puede ser perfecto- traicionan en demasiadas ocasiones al admirable entorno donde crecen sus uvas.

La región se extiende entre los ríos Duero, al sur, y Miño, ya en la frontera con Galicia. Dispone de 34.000 hectáreas de viñedo divididas en nueve subregiones parceladas casi hasta el infinito, con 30.000 viticultores que tocan a una media de poco más de una hectárea por propietario. La región del Vinho Verde, en lo que se refiere al vino, posee la grandeza de lo que la historia apenas ha alterado y la penuria de aquello en lo que nunca se ha invertido lo suficiente. Aunque hay excepciones. La zona está cambiando. Pero sin prisa.

En esta tierra de quintas en torno a las cuales crecen enardecidos los viñedos  desmelenados se producen fundamentalmente vinos blancos. Estos ocupan el 61% de la producción total de vino de la región y conviven con otras especies vinícolas que trataré de despachar en dos párrafos: Los tintos son infames. Se elaboran generalmente con la variedad Vinhao, una casta que únicamente posee color y que da, como resultado de una elaboración tradicionalmente lamentable, vinos de muy baja estofa. Esa elaboración consiste en permitir que el vino realice la fermentación maloláctica en la propia botella – esa fermentación es un proceso por el que el ácido láctico del vino se transforma en ácido málico- y no en tanques de acero inoxidable, que permitirían deshacerse después de sus impurezas y tufos posibles.

Esos mismos tintos, viva la osadía, son a su vez el origen de todo un repertorio de espumosos también tintos de los que no voy a hablar porque su recuerdo me resulta aciago. Esos espumosos, así como los blancos que se producen por el método tradicional a partir de variedades como Alvarinho y Loureiro son terribles. Como lo son la mayoría de los rosados que tuve oportunidad de probar en una semana recorriendo bodegas. Los rosados se producen a partir de la variedad Espadeiro, guardan siempre una punta de carbónico y un poquito de azúcar residual y en el mejor de los casos apenas son capaces de preservar alguna nota de fruta fresca, nunca la suficiente como para que yo recomiende a nadie lanzarse a comprar una botella.

Los blancos son otra cosa. Lo cierto es que mayoritariamente son de una mediocridad notable, pero no se puede negar que responden a un estilo y como tal deben ser respetados. Ese estilo consiste en dejar siempre en ellos, como decía antes de los rosados, una punta dulce de azúcar residual que trata de compensar su acidez marcada y en introducir carbónico en ellos con el fin de aligerar en boca un producto ya de por sí ligero en extremo, porque las uvas rara vez adquieren la madurez necesaria en el viñedo y sus graduaciones alcohólicas son muy bajas.

Hay sin embargo en este capítulo algunas excepciones que merece la pena reseñar y me centraré en dos de ellas. La Primera es una bodega llamada Edmun Do Val, una pequeña bodeguita ubicada en una finca de siete hectáreas donde una familia gallega elabora un vino de la variedad Alvarinho realmente magnífico. Esta pequeña bodega, con unas instalaciones que parecen casi de juguete, pero con un cuidado por la uva que ya quisieran para sí la gran mayoría de sus vecinos, cultiva la citada variedad Alvarinho y un porcentaje mínimo de otras como Trajadura y Loureiro.

La segunda de las bodegas que quisiera reseñar se llama Casa do Valle y se encuentra en la región de Basto, río arriba en el curso del Támega, casi en el límite de la región. Su belleza, tanto la del propio edificio de la Quinta, que alquila una casa rural muy cerca de la bodega, como de los valles próximos es realmente especial. Más allá de su encanto, en cualquier caso, están sus vinos. Un ejemplo acabado de que si en esta región no se encuentran muchos ejemplos de buenos vinos de momento, puede que en el futuro la situación cambie.

Esta bodega es de las pocas que encontré en mi recorrido por la región del Vino Verde que elaboraba sus vinos a partir de uvas procedentes de cepas viejas. He de hacer aquí un apunte histórico.  Si la gran mayoría de los vinos de esta región se encuentran todavía en un periodo de evolución que podríamos describir como poco avanzado, se debe en buena medida en que no fue hasta la década de los setenta cuando se liberalizó en la zona el cultivo de la uva y la producción y venta de vinos. Hasta la Revolución de los Claveles, en 1974, se prohibía la plantación de viñedo en el centro de las parcelas, que debían dedicarse al cultivo de alimentos como el maíz, y se mantenía viva la prohibición de exportar vinos que impuso en el siglo XVIII el marqués de Pombal para evitar que los vinos de esta región compitieran con los del Douro.

Dicho esto, la bodega Casa do Valle dispone de viñedos antiguos porque poseía antiguos derechos de plantación que le permitieron cultivar uva para elaborar y comercializar vino cuando nadie en su entorno lo hacía. El resultado son uvas de variedades como Arinto, Azal, y Loureiro que, a diferencia de lo que ocurre en el resto de la región, son capaces de fusionarse en unos blancos –sin carbónico, prácticamente sin azúcar residual- francos en nariz, limpios, florales y con una frutosidad marcada, al tiempo que en la boca son densos, voluminosos y largos en el paladar. Auténticos vinos de calidad que, a despecho del presente, auguran un futuro prometedor para las bodegas de la región que consigan sumarse con el tiempo a un carro al que de momento pueden aspirar muy pocos. Sus vinos: Casa del Valle VV y Casa del Valle Grande Escolha.