La tele les da cancha

Si Andres Montes se convirtió en la estrella del Mundial gracias a su Tiki y Taka. Estos juegos Olímpios se los ha llevado de calle Fernando Romay. ¿Cómo es la vida del ex deportista en televisión?

Romay consiguió la medalla de plata olímpica en Baloncesto en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984

La final de la Eurocopa o la de los Juegos Olímpicos hacen de oro a los jugadores que la disputan, dan vida a los millones de aficionados que la siguen y convierten en estrellas a los comunicadores que la acercan al público.

Si Andrés Montes brilló con luz propia en el pasado Mundial de fútbol (su tiki y taka forma parte de la historia deportivo televisiva), el rey de los Juegos Olímpicos de este año ha sido, sin duda, Fernando Romay.

Desde que abandonara el baloncesto en los noventa, la tele sedujo a Romay haciendo de su talla un chiste. Sin embargo, ni La batalla de las estrellas, ni La noche de los magníficos, ni Mira quién baila consiguieron estar nunca a la altura del campeón de la canasta, aunque Romay siempre se movió como pez en el agua por estos espectáculos.

El sitio televisivo de Romay, como el de otros tantos ex deportistas que aún lo buscan, es la cabina de retransmisiones. Durante estos juegos, Fernando comentó las jugadas del deporte príncipe conjugando experiencia y chistes fáciles. "¿Cómo se peinará este el pelo?, preguntaba tontorronamente a su compañero de retransmisión. "Ah, no lo sé. Yo no lo llevo así", contestaba racionalmente el periodista Arseni Cañadas.

Parecía que Arseni y Romay no congeniaban del todo durante las retransmisiones, incluso a veces daba la sensación de que no se tragaban. Tras la final, ambos dieron la cara y el porte. De entrada, había una notable diferencia de altura, eran el punto y la I.

Tras la derrota (para ellos, victoría moral), el bueno de Romay se encargó de comunicar a los jugadores de la selección el SMS que le acababa de mandar su hijo: "Papá, no es medalla de plata, es de Oro blanco". Este gran titular ocupa hoy la portada de la mayoría de los periódicos nacionales. Fernando, al igual que nuestra selección de baloncesto, hizo historia. Y esta vez la tele le ofreció la posibilidad de hacerlo en su terreno: la cancha.

¿Y después qué?

La carrera de un deportista es muy corta y la mayoría, ayudados por su nombre, buscan hacerse un hueco en el panorama mediático. Algunos afortunados logran como Fernando situarse cerquita del terreno de juego.

Así, Emilio Butragueño y Michel (Fútbol) Ángel Nieto y Álex Crivillé (MotoGP), Perico Delgado (ciclismo), Arantxa Sánchez Vicario y Álex Corretja (tenis), Joan Creus y Fernando Romay (baloncesto), Alberto Urdiales (balonmano) y José Luis González (atletismo) forman parte del club de comentaristas de TVE.

Aunque no todos corren la misma suerte y la tele se aprovecha de su fama para ofrecerles tomar parte de otros menesteres.

Por ejemplo, Coral Bistuer, ex campeona de Taewkondo, fue una de las concursantes más polémicas de la Selva de los famosos, Paquito y Blanca Fernández Ochoa también formaron parte de otra selva, tras pelear con otros famosos por La batalla de las estrellas (Telecinco), el popular Kiko (del Atlético de Madrid) protagoniza distintos spots con su gracejo andaluz, y Almudena Cid, que acaba de diputar sus últimos juegos Olímpicos como gimnasta, se dejó seducir por el fugaz Desafío bajo cero, programa que ganó.

Almudena también se dejó seducir por Christian Gálvez, su actual novio, al que conoció participando en otro concurso de Telecinco, Pasapalabra. La tele le ha hecho así portadora del oro en el deporte, el espectáculo y en el amor.

Otros, como el ex boxeador Poli Díaz, recurrieron a otro tipo de deportes audiovisuales, pero penetrar en esto formaría parte de otro texto, con varios rombos.

¿Quién es para ti el ex deportista que mejor se lo ha montado?