Con la muerte en los tacones

¿Se vistió Hitchcock de mujer para salir en el film 'Con la muerte en los talones'? Se abre el debate sobre la veracidad  del cameo más controvertido de la historia del cine.

Fotograma de 'Con la muerte en los talones'.

(BOSCO/IVÁN)

Sir Alfred Hitchcock declaró, con su humor habitual, que aparecer en sus películas era para él “una manera indirecta de cumplir con las obligaciones” de su oficio de hombre público. Resultado: “Desgraciadamente, la gente me conoce en todo el mundo, salvo en Londres, debo decir. Nunca he comprendido por qué".

Hitchcock realizó un cameo en 37 de las 52 películas que firmó. El más original de ellos, el más difícil todavía, lo hizo en el film Náufragos, donde un bote lleno de náufragos navega a la deriba durante toda la trama del film. En aquella ocasión, Hitchcock aparecía en un anuncio publicitario de un producto adelgazante llamado Reduco, el típico anuncio del "antes" y el "después".

El pasado jueves 21 de agosto, el diario El Mundo se hizo eco de un rumor que circula por la red: "Alguien ha descubierto un nuevo cameo de Alfred Hitchcoch en la película Con la muerte en los talones". Y si eso no fuera suficientemente extraño, el diario aseguraba que podría ser el maestro vestido de mujer, concretamente en el interior de un vagón de tren.

Resula extraño que un medio nacional como El Mundo se haga eco, con fotogramas del plano en cuestión incluidos, de un rumor con no demasiada consistencia, pero que ha generado ríos de tinta.

Lo primero que extraña del asunto es que el cameo en Con la muerte en los talones ya existe, y se desarrolla en una acera, con Hitchcock perdiendo un autobús. No hay razones aparentes para justificar un segundo cameo en el film, y mucho menos en la mitad de la cinta. Aunque Hitchcock sí apareció dos veces en un mismo film (El enemigo de las rubias, 1927). En el resto de films sólo aparecía una vez y al comienzo de la trama, para que el espectador no se distrajese esperando su inconfundible figura.

Resulta más extraño todavía pensar que un rígido caballero inglés como Sir Alfred pudo travestirse de mujer ante la mirada de todos sus técnicos y colaboradores, resulta poco creíble que hasta hoy no haya habido fotografías, declaraciones de testigos, biografías o estudios que documenten este hecho insólito.

Repasando las imágenes, no se puede negar que la señora se parece mucho a Hitchcock, pero puede ser una mera casualidad. Juzguen ustedes. La polémica está servida.

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