¿Tiene Deco un hermano gemelo?

Es la pregunta que se hacen todos los aficionados al fútbol en general y lo barcelonistas en particular: ¿Tiene Deco un hermano gemelo que ha jugado este año con el Barça? El Deco que hemos podido disfrutar durante la Eurocopa es el mismo que maravilló a todos en sus dos primeras temporadas en el Barcelona. Durante esta campaña en el Camp Nou se ha visto a un jugador que se parecía mucho a Deco. Casi se diría que era él. Pero no. La velocidad, el despliegue, la visión de juego, el pase preciso, el toque de balón sutil... cualidades que posee Deco (el bueno) y que este año han brillado por su ausencia en Deco (el malo, el gemelo).

¿Deco o su hermano? (EFE)

Efectivamente, todo indica que el centrocampista brasileño tiene un gemelo. El verdadero se ha dejado ver durante el año en algún partido como la eliminatoria con el Manchester, pero parece ser que para la larga travesía de la liga enviaba a su hermano. Cuentan que Laporta está tan mosqueado que anda preguntando por un tal Pepe Carvalho (nada que ver con Ricardo, el central del Chelsea) para desentrañar el enigma.

Pero no es Deco el único jugador que parece distinto en esta Eurocopa. En Munich se preguntan qué tiene que ver el fantástico Podolski que golea en los campos de Austria con el jugador que lleva dos años sin rascar bola en el Bayern. Sin salir de la selección teutona, su estrella, Ballack también parece otro al que juega con su club. Aunque su final de campaña ya apuntó una mejora, su jerarquía en el medio campo alemán se echa en falta en el Chelsea. No les hubiera importado tampoco a los aficionados barcelonistas que Gio Van Bronckhorst hubiera mostrado esta temporada en su club la velocidad y precisión reflejada con su selección, con gol a Italia incluido.

En el extremo opuesto, hay algunos jugadores que parecen haber enviado al Europeo a sus hermanos (en algún caso incluso a sus primos). Es el caso de Cesc Fábregas, alma mater del Arsenal y jugador intrascendente con la selección por más oportunidades que le brinda Luis. Si Podolski y Ballack ofrecen en Alemania una versión mejorada de su actuación en sus clubes, lo contrario ocurre con su compatriota Mario Gómez. El delantero del Stuttgart tuvo una actuación lamentable en la primera fase y Low no contó con él contra Portugal. Lo de Luca Toni es diferente. Su hermano es exactamente igual a él, tiene sus mismos movimientos, lucha incansablemente como él, baja y protege el balón tan bien como él. La sutil diferencia está en el remate. Lo que Toni envía al interior de la portería, su hermano lo manda fuera. Cuestión de centímetros.

Pero entre todos es sin duda Deco el que ha sufrido una transformación más radical, por lo que no es descabellado pensar en la existencia de un gemelo. Surge, por tanto, una duda: si el Barcelona, como pretende Guardiola, lo acaba vendiendo, ¿a cuál de ellos venderá? ¿al Deco bueno o a su hermano el malo? La respuesta no es baladí para el club comprador.