En aguas revueltas... El central sueco Petter Hansson se ha aprovechando de un revuelo en el área para acabar anotando el segundo gol para Suecia, que ha resultado definitivo, ya que el marcador no ha vuelto a moverse. Ha sido, hasta ahora, el gol más estrambótico del torneo (con la inestimable ayuda de un indeciso Antonis Nikopolidis).